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AA si Asi ven los uruguayos la causa palestina. Una mujer joven, bella, fecunda y pacífica, para colmo no usa hijab.
Hermosa respuesta del diario Página 12 a la agresión antisemita que recibió hace un tiempo de un ex candidato a la legislatura porteña.
Pagína 12.
¿Cómo es crecer en Uruguay, el país donde la Noche de la Nostalgia es la máxima fiesta nacional?
Ana Pais (@_anapais) BBC Mundo
La Noche de la Nostalgia es un evento donde los padres y abuelos invaden las pistas de baile por derecho propio.
El "Maracanazo", la épica victoria de Uruguay sobre Brasil en la final de la Copa del Mundo de 1950, es una historia repetida hasta el cansancio por los uruguayos.
Con el paso del tiempo, la hazaña más (¿mais?) grande de la historia del fútbol se ha convertido en la perfecta combinación de dos pasiones nacionales: el fútbol y la nostalgia.
Pero a diferencia del fútbol, la nostalgia está institucionalizada. Por ley, todos los 24 de agosto son en Uruguay la Noche de la Nostalgia.Jamás había reparado en lo extraño que es festejar como país aquello que la Real Academia Española define como la "tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida".
Hasta que me mudé a Miami.
Image copyright AP
Image caption La iconografía de "Fiebre de sábado a la noche" es la más repetida al momento de promocionar la Noche de la Nostalgia.
En la "capital de América Latina", con su frenético aquí y ahora, sus playas, palmeras y reggaetón, pensar en una noche dedicada a la nostalgia es una rareza tan grande como el acto de tomar mate por la calle. Pero esa es otra historia.
Esta noche, 600.000 de los 3,4 millones de habitantes que tiene Uruguay saldrán a festejar o, como se dice usualmente en el país, a "nostalgiar", un verbo inventado que denota lo arraigado que está el evento en la idiosincrasia nacional.
Pero, ¿cómo puede ser que esta deprimente premisa sea la máxima fiesta nacional?
Para los padres y abuelosSegún el estudio "Cambio demográfico y desafíos económicos y sociales en el Uruguay del siglo XXI", publicado este año por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Banco Mundial, en 2015 el 19% de la población tenía 60 años o más.
Además, la esperanza de vida al nacer para el año 2011 fue estimada en 72,87 años para los hombres y 79,95 años para las mujeres, de acuerdo con el mismo estudio.Por si esto fuera poco, desde 2004 la tasa de fecundidad está por debajo del valor de reemplazo.
Uruguay es el país más envejecido de América Latina y la Noche de la Nostalgia es una suerte de celebración orgullosa de ese título.
Se trata de un evento donde los padres y abuelos invaden las pistas de baile por derecho propio.
La Noche de la Nostalgia en números600.000
es la cantidad estimada de personas que salen a celebrarla.
Thinkstock
Es una noche en la cual los éxitos principalmente en inglés de los años 60, 70 y 80 vuelven a estar de moda.
Y no se trata de "YMCA" de Village People, un tema que puede sonar en una fiesta de casamiento. Se trata de las bandas que los jóvenes pueden conocer e identificar como "oldies": Bee Gees, Abba, The Beatles, Queen, Stevie Wonder, Blondie; y los que seguramente tendrás que googlear como Modern Talking, Kool & The Gang, Pilot, Kansas, a-ha, Rick Astley.
Incluso hay fiestas donde se incentiva al público a disfrazarse con ropa retro, por lo que durante esa noche es posible ver personas con pantalones acampanados y pelucas con peinados afro.
"La Noche de la Nostalgia, al contrario de lo que indica su nombre, es de las noches mas divertidas del año, se celebra la amistad o el amor de pareja con mucha alegría", me dijo el psicoanalista uruguayo Javier Grotiuz.
Los 24 de agosto hay quienes salen disfrazados con prendas de décadas pasadas, especialmente de la época disco.
Su juventud, cuenta Grotiuz, coincidió con el inicio de esta celebración, hace 38 años: "Cuando salíamos un 24, con mis amigos nos quejábamos porque se llenaba de 'viejos' desenfrenados que no se detenían ante nada y bailaban cada tema como si fuese el último de su vida".
"La biología y el destino quisieron que años después yo pasara a formar parte de esos viejos, aunque en mi caso con un poco de mesura a la hora de bailar".De lo privado a lo nacionalPero en la Noche de la Nostalgia no sólo suena música "vieja". Para el propio Pablo Lecueder, el empresario que creó la fiesta en 1978, la nostalgia empieza 10 años después de publicada una canción.
En verdad, es difícil saber si Lecueder efectivamente dijo dicha frase alguna vez. Probablemente lo haya dicho en algún momento, pero es que al director de la radio Océano FM lo entrevistan todos los años, en cada previa del 24 de agosto.
Se acerca el día y todos sabemos que va a aparecer.
Su historia es conocida por todos los uruguayos: cuando Lecueder era un veinteañero conductor del programa de radio "Old hits", organizó una fiesta dedicada a los viejos éxitos musicales.
La idea creció y se multiplicó hasta superar las 400 fiestas sólo en Montevideo. Llega a movilizar a un público estimado de 600.000 personas en todo el país, según la "Guía de fiestas uruguayas" editada por Presidencia, el Ministerio de Turismo y el Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay.
Según dicha guía, es la noche con la convocatoria más masiva de todo el año y hasta "provoca la masiva llegada de turistas de la región", aunque no se detallan cuántos.De hecho, la ley que fijó oficialmente el 24 de agosto como la Noche de la Nostalgia, que fue promulgada recién en 2004, estableció que el Ministerio de Turismo debe promocionarla "en el exterior a través de embajadas, consulados y oficinas comerciales".
La nostalgia es marca país de Uruguay.
Image copyright Getty Images
Image caption En Uruguay existe "una visión nostálgica del inmigrante europeo que llegó añorando su tierra y que se nota aún en el colectivo", dice Carla Aguirre, doctora en psicología social y antropología chilena.
Los que se fueronLa clave del éxito de esta celebración no radica sólo en apelar a la melancolía del uruguayo en un país envejecido. Es haberla fijado en la noche anterior a un feriado nacional no laborable, el 25 de agosto, día de la declaratoria de la independencia.
Incluso es casi que irónico que la Noche de la Nostalgia sea la previa de esta fecha patria.La chilena Carla Aguirre, doctora en Psicología Social y Antropología de la Universidad Católica del Uruguay, ni siquiera termina de entender cómo la nostalgia y el nacionalismo están tan unidos en este país.
Para ella en Uruguay existe "una visión nostálgica del inmigrante europeo que llegó añorando su tierra y que se nota aún en el colectivo".
De acuerdo a la Organización Internacional para las Migraciones, "la migración internacional es un componente fundamental en la historia de la población uruguaya".
Hasta mediados del siglo XX, Uruguay fue un país con saldos migratorios positivos, principalmente de europeos, lo que generó "un impacto significativo desde el punto de vista demográfico, social y cultural".
El "Maracanazo", la victoria de Uruguay ante Brasil en la Copa del Mundo de 1950, es quizá la máxima expresión del "ser uruguayo": fútbol y nostalgia en un sólo hecho.
Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XX, el saldo se transformó en negativo. Para Grotiuz, quien es miembro del Grupo Lacaniano Montevideo, esta es la explicación de la nostalgia uruguaya.
"Se puede apreciar claramente en los uruguayos que tuvieron que exiliarse en el exterior en el pasado, durante la dictadura, y otros tantos que viven en otros países desde hace muchos años y que, al recordar 'el paisito', les brota: 'Viejo... barrio... perdona que al evocarte se me pianta un lagrimón', como dice el tango 'Melodía de arrabal'", de Carlos Gardel.
Ya sea por los que llegaron o los que, como yo, se fueron, la nostalgia es parte de la esencia del uruguayo, presente en cada charla con mate y discusión de fútbol incluida.
Y como sí dijo el empresario Lecueder: "Recordar es lindo, pero con música es mucho mejor".
Fin
Ana Pais (@_anapais) BBC Mundo
- 24 agosto 2016
La Noche de la Nostalgia es un evento donde los padres y abuelos invaden las pistas de baile por derecho propio.
El "Maracanazo", la épica victoria de Uruguay sobre Brasil en la final de la Copa del Mundo de 1950, es una historia repetida hasta el cansancio por los uruguayos.
Con el paso del tiempo, la hazaña más (¿mais?) grande de la historia del fútbol se ha convertido en la perfecta combinación de dos pasiones nacionales: el fútbol y la nostalgia.
Pero a diferencia del fútbol, la nostalgia está institucionalizada. Por ley, todos los 24 de agosto son en Uruguay la Noche de la Nostalgia.Jamás había reparado en lo extraño que es festejar como país aquello que la Real Academia Española define como la "tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida".
Hasta que me mudé a Miami.
Image copyright AP
Image caption La iconografía de "Fiebre de sábado a la noche" es la más repetida al momento de promocionar la Noche de la Nostalgia.
En la "capital de América Latina", con su frenético aquí y ahora, sus playas, palmeras y reggaetón, pensar en una noche dedicada a la nostalgia es una rareza tan grande como el acto de tomar mate por la calle. Pero esa es otra historia.
Esta noche, 600.000 de los 3,4 millones de habitantes que tiene Uruguay saldrán a festejar o, como se dice usualmente en el país, a "nostalgiar", un verbo inventado que denota lo arraigado que está el evento en la idiosincrasia nacional.
Pero, ¿cómo puede ser que esta deprimente premisa sea la máxima fiesta nacional?
Para los padres y abuelosSegún el estudio "Cambio demográfico y desafíos económicos y sociales en el Uruguay del siglo XXI", publicado este año por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y el Banco Mundial, en 2015 el 19% de la población tenía 60 años o más.
Además, la esperanza de vida al nacer para el año 2011 fue estimada en 72,87 años para los hombres y 79,95 años para las mujeres, de acuerdo con el mismo estudio.Por si esto fuera poco, desde 2004 la tasa de fecundidad está por debajo del valor de reemplazo.
Uruguay es el país más envejecido de América Latina y la Noche de la Nostalgia es una suerte de celebración orgullosa de ese título.
Se trata de un evento donde los padres y abuelos invaden las pistas de baile por derecho propio.
La Noche de la Nostalgia en números600.000
es la cantidad estimada de personas que salen a celebrarla.
- 400 es el número promedio de fiestas que se organizan en Montevideo.
Thinkstock
Es una noche en la cual los éxitos principalmente en inglés de los años 60, 70 y 80 vuelven a estar de moda.
Y no se trata de "YMCA" de Village People, un tema que puede sonar en una fiesta de casamiento. Se trata de las bandas que los jóvenes pueden conocer e identificar como "oldies": Bee Gees, Abba, The Beatles, Queen, Stevie Wonder, Blondie; y los que seguramente tendrás que googlear como Modern Talking, Kool & The Gang, Pilot, Kansas, a-ha, Rick Astley.
Incluso hay fiestas donde se incentiva al público a disfrazarse con ropa retro, por lo que durante esa noche es posible ver personas con pantalones acampanados y pelucas con peinados afro.
"La Noche de la Nostalgia, al contrario de lo que indica su nombre, es de las noches mas divertidas del año, se celebra la amistad o el amor de pareja con mucha alegría", me dijo el psicoanalista uruguayo Javier Grotiuz.
Los 24 de agosto hay quienes salen disfrazados con prendas de décadas pasadas, especialmente de la época disco.
Su juventud, cuenta Grotiuz, coincidió con el inicio de esta celebración, hace 38 años: "Cuando salíamos un 24, con mis amigos nos quejábamos porque se llenaba de 'viejos' desenfrenados que no se detenían ante nada y bailaban cada tema como si fuese el último de su vida".
"La biología y el destino quisieron que años después yo pasara a formar parte de esos viejos, aunque en mi caso con un poco de mesura a la hora de bailar".De lo privado a lo nacionalPero en la Noche de la Nostalgia no sólo suena música "vieja". Para el propio Pablo Lecueder, el empresario que creó la fiesta en 1978, la nostalgia empieza 10 años después de publicada una canción.
En verdad, es difícil saber si Lecueder efectivamente dijo dicha frase alguna vez. Probablemente lo haya dicho en algún momento, pero es que al director de la radio Océano FM lo entrevistan todos los años, en cada previa del 24 de agosto.
Se acerca el día y todos sabemos que va a aparecer.
Su historia es conocida por todos los uruguayos: cuando Lecueder era un veinteañero conductor del programa de radio "Old hits", organizó una fiesta dedicada a los viejos éxitos musicales.
La idea creció y se multiplicó hasta superar las 400 fiestas sólo en Montevideo. Llega a movilizar a un público estimado de 600.000 personas en todo el país, según la "Guía de fiestas uruguayas" editada por Presidencia, el Ministerio de Turismo y el Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay.
Según dicha guía, es la noche con la convocatoria más masiva de todo el año y hasta "provoca la masiva llegada de turistas de la región", aunque no se detallan cuántos.De hecho, la ley que fijó oficialmente el 24 de agosto como la Noche de la Nostalgia, que fue promulgada recién en 2004, estableció que el Ministerio de Turismo debe promocionarla "en el exterior a través de embajadas, consulados y oficinas comerciales".
La nostalgia es marca país de Uruguay.
Image copyright Getty Images
Image caption En Uruguay existe "una visión nostálgica del inmigrante europeo que llegó añorando su tierra y que se nota aún en el colectivo", dice Carla Aguirre, doctora en psicología social y antropología chilena.
Los que se fueronLa clave del éxito de esta celebración no radica sólo en apelar a la melancolía del uruguayo en un país envejecido. Es haberla fijado en la noche anterior a un feriado nacional no laborable, el 25 de agosto, día de la declaratoria de la independencia.
Incluso es casi que irónico que la Noche de la Nostalgia sea la previa de esta fecha patria.La chilena Carla Aguirre, doctora en Psicología Social y Antropología de la Universidad Católica del Uruguay, ni siquiera termina de entender cómo la nostalgia y el nacionalismo están tan unidos en este país.
Para ella en Uruguay existe "una visión nostálgica del inmigrante europeo que llegó añorando su tierra y que se nota aún en el colectivo".
De acuerdo a la Organización Internacional para las Migraciones, "la migración internacional es un componente fundamental en la historia de la población uruguaya".
Hasta mediados del siglo XX, Uruguay fue un país con saldos migratorios positivos, principalmente de europeos, lo que generó "un impacto significativo desde el punto de vista demográfico, social y cultural".
El "Maracanazo", la victoria de Uruguay ante Brasil en la Copa del Mundo de 1950, es quizá la máxima expresión del "ser uruguayo": fútbol y nostalgia en un sólo hecho.
Sin embargo, en la segunda mitad del siglo XX, el saldo se transformó en negativo. Para Grotiuz, quien es miembro del Grupo Lacaniano Montevideo, esta es la explicación de la nostalgia uruguaya.
"Se puede apreciar claramente en los uruguayos que tuvieron que exiliarse en el exterior en el pasado, durante la dictadura, y otros tantos que viven en otros países desde hace muchos años y que, al recordar 'el paisito', les brota: 'Viejo... barrio... perdona que al evocarte se me pianta un lagrimón', como dice el tango 'Melodía de arrabal'", de Carlos Gardel.
Ya sea por los que llegaron o los que, como yo, se fueron, la nostalgia es parte de la esencia del uruguayo, presente en cada charla con mate y discusión de fútbol incluida.
Y como sí dijo el empresario Lecueder: "Recordar es lindo, pero con música es mucho mejor".
Fin
La amante judía de Mussolini estuvo en Montevideo.
Isidoro Gilbert, La República.
Margherita Sarfatti recaló en Montevideo en 1939, huyendo de las leyes raciales impuestas a la Italia de Benito Mussolini por Adolfo Hitler, y vivió en Uruguay hasta que finalizó la Segunda Guerra Mundial.
M. Sarfatti, excelsa crítica de arte y judía, fue la amante por dos décadas de Mussolini, pero también estuvo entre los fundadores, con el Duce, del partido Fascista y fue un nexo entre el régimen italiano y el gran capital norteamericano. Fue la biógrafa oficial del dictador hasta que entró en desgracia, a pesar de que se proclamaba católica.
¿A santo de qué esta rememoración de un personaje explicable, en parte, por lo que provocó la Primera Guerra?
Es que acaba de aparecer “El amor judío de Mussolini”, del periodista Daniel Gutman, un exhaustivo estudio de esta mujer que influyó enormemente, y no sólo por las delicias de alcoba, sobre el líder de las derechas de Italia. Culta, brillante crítica de arte, a su esfuerzo la pintura, la escultura y hasta la arquitectura de Italia adquiere los rasgos dominantes del régimen. Pudo ser amiga del plástico argentino Emilio Pettoruti, pero también del muralista mexicano Diego Rivera, de Jean Cocteau, del mismísimo Alberto Moravia (judío como ella), en fin del utópico Bernard Shaw como del intelectual fascista Miguel D’Anunzio. Después de la revolución socialista de octubre, ella y Mussolini crearon Avanti y pasaron fugazmente por el socialismo de izquierda porque lo habían visto como el camino bolchevique para Italia. Giraron 180 grados y optaron por defender al gran capital.
Sarfatti eligió Montevideo como sitio seguro de exilio porque aquí trabajaba su hijo como banquero. Hubiera preferido ir a Estado Unidos, pero sus compromisos con el Duce se lo impidieron a pesar de sus contactos en el más alto nivel económico e intelectual. Quienes hayan visto “Abajo el telón”, “The cradle will rock”, ubicarán al personaje que interpreta Susan Sarandon. La película cuenta un episodio legendario del teatro estadounidense durante los años de la Gran Depresión.
Esta biografía sobre la Sarfatti permite repasar la historia sobre el nacimiento, ascenso y caída del fascismo, así como conocer el respaldo de un sector de la comunidad hebrea en Italia, de unos 40 mil miembros en esos tiempos, que respaldó al Duce, cuya faceta antisemita salió a luz cuando la firma del Eje con Alemania y Japón. Dos miembros de esa colectividad fueron ministros de Mussolini, porque los intereses de clase eran mayores al resguardo ético que, a la postre, no impidió que a una parte de los judíos italianos de nada les sirviera su prosapia legendaria de tiempos de los romanos para correr la misma suerte que los judíos alemanes que creyeron ser “una de las tribus” fundadoras de la nación alemana.
Sarfatti fue colaboradora en Montevideo de El Diario. Vivió en el hotel Nogaró en la Ciudad Vieja, se codeó con los líderes blancos y colorados, y fue respetada a pesar de su pasado. Su paso por Buenos Aires la ubicó en el espacio liberal que lideraba Victoria Ocampo y acaso por eso vivió con terror el surgimiento del peronismo. Vale la pena leer esta investigación.
Daniel Gutman. ” El amor judío de Mussolini. Margherita Sarfatti del fascismo al exilio”. Buenos Aires. Lumière. *
Los porteños asaltando el Liberaij.
ALEJANDRA PINTOS nov 5 2014 11:21, El Pais.
En el 1182 de la calle Julio Herrera y Obes se levanta un edificio que a simple vista, es como cualquier otro del Centro. Fachada de mármol y letras de bronce que anuncian su nombre, sin ninguna particularidad. Pero no es uno más, es el Liberaij. El lugar donde hace unos años las marcas de un episodio emblemático para el Río de la Plata podían verse en los días de humedad.
A diferencia de lo que puede suceder en otras partes del mundo, Uruguay no se destaca por tener historias policiales memorables. Salvo excepciones, no hubo grandes botines ni héroes delictivos que pasaran a la historia.
Pero hace 49 años, este edificio era protagonista de un operativo policial que, décadas después se transformó en una película. Marcelo "Nene" Brignone, Carlos "Cuervo" Mereles y Roberto "Gaucho" Dorda eran tres delicuentes argentinos que huyeron de Buenos Aires y se refugiaron en Montevideo. Habían robado un furgón que transportaba dinero y asesinado a varias personas. Tras varios días en Montevideo murieron acribillados por la Policía en un espectacular operativo montado entre el 4 y 5 de noviembre de 1965, que duró casi 16 horas. Murieron también dos policías, el agente Héctor Horacio Aranguren y el comisario Washington Santana.
Esos días quedaron grabados a fuego en la memoria colectiva: hasta entonces nunca nadie había visto algo igual. La violencia del hecho fascinó a muchos. Y la historia truculenta sacudió a la sociedad uruguaya, inspiró artículos, libros y quedó inmortalizado en las estrofas del clásico "Brindis por Pierrot" de Jaime Roos. "Plata Quemada", del director argentino Marcelo Piñeryro, y protagonizada por Eduardo Noriega, Leonardo Sbaraglia y Pablo Echarri fue un éxito de taquilla que a comienzos de este siglo puso el episodio en la atención de nuevas generaciones.
Sin embargo, no todos quieren seguir recordando el episodio. Tal vez porque el recuerdo de ese día parece estar de algún modo en sus paredes, los vecinos que hoy viven en Liberaij buscan borrarlo de sus recuerdos.
La mayoría de quienes viven hoy ahí son personas jóvenes, desligadas de lo que sucedió ese fatídico 5 de noviembre de 1965. Otros recuerdan el operativo, pero dicen que simplemente decidieron no darle demasiada importancia. “Hace cincuenta años si me decían que iba a vivir en el Liberaij no lo creía”, dice una vecina.
Hoy casi no hay testigos del tiroteo viviendo en el 1182 de Julio Herrera y Obes. Quienes estaban en el edificio en aquel momento murieron o no viven más en esas paredes. Pero una mujer aún habita el mismo apartamento desde 1965. Así lo confirmó su marido, aunque ella prefirió no hablar de lo ocurrido.
Nadie quiere hablar. Ni "que se revuelva el tema”, dice una vecina. Pero todos saben que al acercarse la fecha, empiezan los timbres a sonar de nuevo. Periodistas, estudiantes, investigadores y curiosos se acercan. Tienen, tal vez, la esperanza de llevarse con ellos un poco de la mística que aún flota en los pasillos del Liberaij.
En el 1182 de la calle Julio Herrera y Obes se levanta un edificio que a simple vista, es como cualquier otro del Centro. Fachada de mármol y letras de bronce que anuncian su nombre, sin ninguna particularidad. Pero no es uno más, es el Liberaij. El lugar donde hace unos años las marcas de un episodio emblemático para el Río de la Plata podían verse en los días de humedad.
A diferencia de lo que puede suceder en otras partes del mundo, Uruguay no se destaca por tener historias policiales memorables. Salvo excepciones, no hubo grandes botines ni héroes delictivos que pasaran a la historia.
Pero hace 49 años, este edificio era protagonista de un operativo policial que, décadas después se transformó en una película. Marcelo "Nene" Brignone, Carlos "Cuervo" Mereles y Roberto "Gaucho" Dorda eran tres delicuentes argentinos que huyeron de Buenos Aires y se refugiaron en Montevideo. Habían robado un furgón que transportaba dinero y asesinado a varias personas. Tras varios días en Montevideo murieron acribillados por la Policía en un espectacular operativo montado entre el 4 y 5 de noviembre de 1965, que duró casi 16 horas. Murieron también dos policías, el agente Héctor Horacio Aranguren y el comisario Washington Santana.
Esos días quedaron grabados a fuego en la memoria colectiva: hasta entonces nunca nadie había visto algo igual. La violencia del hecho fascinó a muchos. Y la historia truculenta sacudió a la sociedad uruguaya, inspiró artículos, libros y quedó inmortalizado en las estrofas del clásico "Brindis por Pierrot" de Jaime Roos. "Plata Quemada", del director argentino Marcelo Piñeryro, y protagonizada por Eduardo Noriega, Leonardo Sbaraglia y Pablo Echarri fue un éxito de taquilla que a comienzos de este siglo puso el episodio en la atención de nuevas generaciones.
Sin embargo, no todos quieren seguir recordando el episodio. Tal vez porque el recuerdo de ese día parece estar de algún modo en sus paredes, los vecinos que hoy viven en Liberaij buscan borrarlo de sus recuerdos.
La mayoría de quienes viven hoy ahí son personas jóvenes, desligadas de lo que sucedió ese fatídico 5 de noviembre de 1965. Otros recuerdan el operativo, pero dicen que simplemente decidieron no darle demasiada importancia. “Hace cincuenta años si me decían que iba a vivir en el Liberaij no lo creía”, dice una vecina.
Hoy casi no hay testigos del tiroteo viviendo en el 1182 de Julio Herrera y Obes. Quienes estaban en el edificio en aquel momento murieron o no viven más en esas paredes. Pero una mujer aún habita el mismo apartamento desde 1965. Así lo confirmó su marido, aunque ella prefirió no hablar de lo ocurrido.
Nadie quiere hablar. Ni "que se revuelva el tema”, dice una vecina. Pero todos saben que al acercarse la fecha, empiezan los timbres a sonar de nuevo. Periodistas, estudiantes, investigadores y curiosos se acercan. Tienen, tal vez, la esperanza de llevarse con ellos un poco de la mística que aún flota en los pasillos del Liberaij.
Montevideo, la Bella Durmiente.
El País de Madrid.
Con sus fachadas ennegrecidas por la contaminación y sus avenidas destartaladas, Montevideo esconde un rico patrimonio abandonado. A la capital uruguaya le confiere una belleza decadente. Muy lejos del esplendor con el que varias oleadas de inmigrantes trataron de levantar a partir del siglo XIX: una utópica capital europea. Esta ciudad concentra un tercio de la población uruguaya, 1,3 millones de personas, y mira al Río de la Plata, la bahía elegida en 1726 por el rey de España, Felipe V, para fundar un fuerte capaz de contener el avance de los portugueses.
Se puede decir sin exagerar que Montevideo es una de las pocas capitales del mundo que carece de circuito turístico. Es habitual ver a los visitantes deambulando desorientados por los barrios históricos, atentos a las sorpresas que las calles les descubren: edificios modernistas, palacios franceses o casonas coloniales. Todos con sus puertas cerradas. Hay pocas guías turísticas que resuman la oferta de la ciudad, la señalización urbana casi no existe y los horarios de los museos son un desafío a la lógica. Estos pueden abrir tarde o no abrir, y permanecen cerrados los fines de semana.
Muchos visitantes se pueden quedar con la impresión de que Montevideo es una ciudad con poco atractivo. Un malentendido que por el momento sólo pueden aclarar los expertos. Entre ellos se encuentra la arquitecta Gabriela Pallares, quien conoce cada fachada de 18 de Julio, la principal avenida montevideana que tanto recuerda a la Gran Vía de Madrid a principios de los años 80. Pallares es autora de un blog que ha tenido enorme éxito al denunciar demoliciones de edificios de interés artístico y hacer propuestas de mejora. La arquitecta advierte que para apreciar la 18 de Julio hay que mirar hacia arriba, esquivando las marquesinas de las tiendas, el pésimo estado del mobiliario urbano, los puestos callejeros, la basura… entonces, aparecen las construcciones fastuosas. Edificios con una mezcla de estilos, algunos con una expresión más francesa, otros expresionistas o que adquieren las influencias del movimiento art déco. “Aquí hay una cultura de que sólo lo moderno es bueno. Se cree que todo lo nuevo es mejor que lo antiguo, y eso es un error. Se pueden mejorar las cosas sin una inversión enorme, basta una buena iluminación, un poco de sentido común”, asegura Pallares.
La decadencia de Montevideo empezó en los años setenta, junto con el descenso económico del país y la dictadura (1973-1984). Con la llegada de la democracia surgieron otras dificultades, como la magnitud de la inversión para recuperar una ciudad tan grande como París, pero con solo el 20% de la población de la capital francesa. El ayuntamiento de la ciudad, en manos del izquierdista Frente Amplio, es también el objeto de muchas críticas, ya que la mayor parte del presupuesto municipal se gasta en pagar los sueldos de funcionarios.
Por todo esto, los tesoros de Montevideo están abandonados, pero en muchos casos también intactos. La capital uruguaya languidece mientas otras ciudades latinoamericanas como Lima o Guayaquil se renuevan, y otras como Santiago de Chile se entregan a una euforia de modernidad y consumismo. En este año electoral, con las presidenciales previstas para octubre, ningún candidato parece tener un plan para Montevideo.
El emblema de la ciudad es el Palacio Salvo, una especie de rascacielos situado en la céntrica Plaza Independencia, al final de la avenida 18 de Julio. Tiene un estilo gótico y fue diseñado por el italiano Mario Palanti. La construcción finalizó en 1928, cinco años después de su inicio, y se convirtió por casi 10 años en el edificio más alto de América Latina. Ahora, el Palacio Salvo está en un estado deplorable. Sus pasillos son para visitantes audaces que se atreven a colarse por donde ocurren escenas dignas de una película de David Lynch.
Durante el siglo XX, cuando Uruguay era un país rico y exportaba sus materias primas —especialmente carne— a la Europa arruinada por la Primera Guerra Mundial, los millonarios rivalizaban con sus ambiciosas construcciones. Muchos edificios competían con el Palacio Salvo, como el Palacio Lapido, inspirado en el expresionismo alemán, o el Palacio Díaz, otro rascacielos levantado en 1930 por otro inmigrante, el español Pedro Díaz, político y comerciante conocido por su anticlericalismo y por pertenecer a la masonería.
El exalcalde y arquitecto Mariano Arana considera que el verdadero precursor de la capital es el expresidente José Batlle y Ordóñez (1856-1929). Fue considerado el fundador del Uruguay moderno, un Estado social y laico. Este exmandatario “trató de crear una Europa culta en el nuevo continente porque estaba convencido de que Uruguay tenía un destino propio”, asegura Arana.
A partir de 1910, Batlle y Ordóñez abrió concursos públicos para construir avenidas y edificios estatales, fundó escuelas de arte y contrató a los mejores arquitectos extranjeros, como el francés Joseph Marie Carré, autor de muchas obras montevideanas, entre las cuales está el espléndido Jockey Club. En este edificio céntrico y lujoso se reunían solo hombres, esencialmente de la aristocracia británica residente en la ciudad y grandes personajes como el cantante de tango Carlos Gardel. Muy pocos han tenido el privilegio de ver por dentro el lugar, comprado hace unos años por la ridícula suma de un millón de dólares por un empresario que lo mantiene cerrado.
Durante esos años la capital laica y moderna se levantó sobre la ciudad colonial, y en ocasiones ambas expresiones se mezclaron, como la Plaza Matriz, situada en el casco histórico. En esta explanada está el Ayuntamiento y una catedral de estilo colonial. El casco histórico es la entrada natural de los turistas que llegan al puerto. Un lugar lúgubre y vacío por la noche, pero que durante el día ofrece las mejores vistas a la bahía, y produce la impresión de estar en Cádiz, imagen de nostalgia para los colonos andaluces que poblaron la ciudad.
Se puede decir sin exagerar que Montevideo es una de las pocas capitales del mundo que carece de circuito turístico. Es habitual ver a los visitantes deambulando desorientados por los barrios históricos, atentos a las sorpresas que las calles les descubren: edificios modernistas, palacios franceses o casonas coloniales. Todos con sus puertas cerradas. Hay pocas guías turísticas que resuman la oferta de la ciudad, la señalización urbana casi no existe y los horarios de los museos son un desafío a la lógica. Estos pueden abrir tarde o no abrir, y permanecen cerrados los fines de semana.
Muchos visitantes se pueden quedar con la impresión de que Montevideo es una ciudad con poco atractivo. Un malentendido que por el momento sólo pueden aclarar los expertos. Entre ellos se encuentra la arquitecta Gabriela Pallares, quien conoce cada fachada de 18 de Julio, la principal avenida montevideana que tanto recuerda a la Gran Vía de Madrid a principios de los años 80. Pallares es autora de un blog que ha tenido enorme éxito al denunciar demoliciones de edificios de interés artístico y hacer propuestas de mejora. La arquitecta advierte que para apreciar la 18 de Julio hay que mirar hacia arriba, esquivando las marquesinas de las tiendas, el pésimo estado del mobiliario urbano, los puestos callejeros, la basura… entonces, aparecen las construcciones fastuosas. Edificios con una mezcla de estilos, algunos con una expresión más francesa, otros expresionistas o que adquieren las influencias del movimiento art déco. “Aquí hay una cultura de que sólo lo moderno es bueno. Se cree que todo lo nuevo es mejor que lo antiguo, y eso es un error. Se pueden mejorar las cosas sin una inversión enorme, basta una buena iluminación, un poco de sentido común”, asegura Pallares.
La decadencia de Montevideo empezó en los años setenta, junto con el descenso económico del país y la dictadura (1973-1984). Con la llegada de la democracia surgieron otras dificultades, como la magnitud de la inversión para recuperar una ciudad tan grande como París, pero con solo el 20% de la población de la capital francesa. El ayuntamiento de la ciudad, en manos del izquierdista Frente Amplio, es también el objeto de muchas críticas, ya que la mayor parte del presupuesto municipal se gasta en pagar los sueldos de funcionarios.
Por todo esto, los tesoros de Montevideo están abandonados, pero en muchos casos también intactos. La capital uruguaya languidece mientas otras ciudades latinoamericanas como Lima o Guayaquil se renuevan, y otras como Santiago de Chile se entregan a una euforia de modernidad y consumismo. En este año electoral, con las presidenciales previstas para octubre, ningún candidato parece tener un plan para Montevideo.
El emblema de la ciudad es el Palacio Salvo, una especie de rascacielos situado en la céntrica Plaza Independencia, al final de la avenida 18 de Julio. Tiene un estilo gótico y fue diseñado por el italiano Mario Palanti. La construcción finalizó en 1928, cinco años después de su inicio, y se convirtió por casi 10 años en el edificio más alto de América Latina. Ahora, el Palacio Salvo está en un estado deplorable. Sus pasillos son para visitantes audaces que se atreven a colarse por donde ocurren escenas dignas de una película de David Lynch.
Durante el siglo XX, cuando Uruguay era un país rico y exportaba sus materias primas —especialmente carne— a la Europa arruinada por la Primera Guerra Mundial, los millonarios rivalizaban con sus ambiciosas construcciones. Muchos edificios competían con el Palacio Salvo, como el Palacio Lapido, inspirado en el expresionismo alemán, o el Palacio Díaz, otro rascacielos levantado en 1930 por otro inmigrante, el español Pedro Díaz, político y comerciante conocido por su anticlericalismo y por pertenecer a la masonería.
El exalcalde y arquitecto Mariano Arana considera que el verdadero precursor de la capital es el expresidente José Batlle y Ordóñez (1856-1929). Fue considerado el fundador del Uruguay moderno, un Estado social y laico. Este exmandatario “trató de crear una Europa culta en el nuevo continente porque estaba convencido de que Uruguay tenía un destino propio”, asegura Arana.
A partir de 1910, Batlle y Ordóñez abrió concursos públicos para construir avenidas y edificios estatales, fundó escuelas de arte y contrató a los mejores arquitectos extranjeros, como el francés Joseph Marie Carré, autor de muchas obras montevideanas, entre las cuales está el espléndido Jockey Club. En este edificio céntrico y lujoso se reunían solo hombres, esencialmente de la aristocracia británica residente en la ciudad y grandes personajes como el cantante de tango Carlos Gardel. Muy pocos han tenido el privilegio de ver por dentro el lugar, comprado hace unos años por la ridícula suma de un millón de dólares por un empresario que lo mantiene cerrado.
Durante esos años la capital laica y moderna se levantó sobre la ciudad colonial, y en ocasiones ambas expresiones se mezclaron, como la Plaza Matriz, situada en el casco histórico. En esta explanada está el Ayuntamiento y una catedral de estilo colonial. El casco histórico es la entrada natural de los turistas que llegan al puerto. Un lugar lúgubre y vacío por la noche, pero que durante el día ofrece las mejores vistas a la bahía, y produce la impresión de estar en Cádiz, imagen de nostalgia para los colonos andaluces que poblaron la ciudad.
Uruguay es un país de clase media. ( El Observador, 23-10-13)
El único en la región donde más de la mitad de la población pertenece a ese nivel de ingresos. Sin embargo, en los últimos 20 años, la movilidad social estuvo acotada a aquellos hogares vulnerables que lograron ascender a la parte más baja de la clase media, pero no hubo capacidad de trascender más allá. En las últimas dos décadas, el acceso a la clase alta estuvo por fuera de las posibilidades de los uruguayos de ingresos medios y bajos.
Según el informe titulado La movilidad económica y el crecimiento de la clase media en América Latina, publicado este mes por el Banco Mundial, 55% de los uruguayos pertenecían a la clase media en el año 2009, liderando el ránking regional. “A pesar de que en Uruguay, más del 50% de la sociedad pertenece a la clase media, esa proporción disminuye a casi una tercera parte en países como Brasil y Panamá, y a menos de una quinta parte en El Salvador y Honduras”, señala la publicación.
Si bien el tamaño de esa clase media uruguaya se redujo entre el año 2000 y 2010 –afectada fuertemente por la crisis de 2002–, muestra un importante crecimiento al tomar un período mayor y compararla con el año 1989.
El informe del Banco Mundial ordena a la población en cuatro grupos de acuerdo a su capacidad adquisitiva. Los pobres son aquellos que viven en hogares donde el ingreso diario es menor a US$ 4 por día per cápita. El segundo grupo es el de la población vulnerable, donde el ingreso va de US$ 10 a US$ 14 por día. En tanto, la clase media percibe entre US$ 10 y US$ 50 por integrante del hogar, mientras que la clase alta corresponde al grupo que cuenta con ingresos mayores a esa cifra.
Todos los valores están expresados a precios de 2005 y reflejan una paridad en el poder de compra (PPP) entre todos los países relevados –es decir, se toma una cotización tal que US$ 1 pueda adquirir la misma cantidad de bienes y servicios en Uruguay que en cualquiera de los demás países relevados–.
La movilidad social fue evidente en las últimas dos décadas. Mientras que en 1989 el 12,1% de los uruguayos era pobre, 20 años después esa proporción bajó a 4,5%. En tanto, la población vulnerable pasó de 37,8% a 21,1% de la población local.
Entre quienes eran pobres en 1989, 60% lograron abandonar su condición de pobreza y pasaron a una condición de vulnerabilidad. Sin embargo, solo 4% de los pobres lograron escalar a la clase media en Uruguay, según los datos procesados por los responsables del estudio.
En el caso de la población vulnerable hace 20 años, casi dos terceras partes (63%) hoy pertenece a la clase media o alta, mientras que menos de 1% cayó a la pobreza. Tampoco se detecta una caída por parte de la población media y alta. Apenas 0,2% mostró un deterioro de su condición socioeconómica que los llevó a nivel de ingresos de la población vulnerable.
“La mayor parte de la población que accedió a la clase media entre 1989 y 2009 en Uruguay se encontraba cerca del umbral de la clase media (US$ 10 PPP) en 1989. Una vez que accedieron a la clase media, la mayoría de ellos se situaron en la franja de US$ 10 – US$ 15 PPP al día”, explica el estudio.
Si bien los datos son auspiciosos en cuanto a la movilidad de las clases socioeconómicas más bajas, a nivel de la clase media lo que primó fue el estancamiento. Menos de 1% de las personas que se desplazaron de forma ascendente procedieron de la clase media.
Entre los menos móviles
Además, en la comparación regional, Uruguay no queda bien parado en cuanto al porcentaje de población que logró un ascenso socioeconómico. Mientras que a nivel local el porcentaje fue de 30%, solo Paraguay, Argentina, México y Venezuela muestran porcentajes menores que los locales.
Chile lidera el ránking con más de 60% de su población con movilidad ascendente. En Brasil, Colombia, Ecuador y Bolivia supera el 50%. En Perú es mayor al 40% y solo en Argentina, Venezuela y Paraguay, entre los países de América del Sur, hubo una movilidad menor que en Uruguay.
Según concluye el estudio, “la vulnerabilidad ante la pobreza sigue siendo una importante preocupación para la mayoría, y las políticas sociales seguirán jugando un rol importante en las vidas de muchos hogares en un futuro previsible”.
El único en la región donde más de la mitad de la población pertenece a ese nivel de ingresos. Sin embargo, en los últimos 20 años, la movilidad social estuvo acotada a aquellos hogares vulnerables que lograron ascender a la parte más baja de la clase media, pero no hubo capacidad de trascender más allá. En las últimas dos décadas, el acceso a la clase alta estuvo por fuera de las posibilidades de los uruguayos de ingresos medios y bajos.
Según el informe titulado La movilidad económica y el crecimiento de la clase media en América Latina, publicado este mes por el Banco Mundial, 55% de los uruguayos pertenecían a la clase media en el año 2009, liderando el ránking regional. “A pesar de que en Uruguay, más del 50% de la sociedad pertenece a la clase media, esa proporción disminuye a casi una tercera parte en países como Brasil y Panamá, y a menos de una quinta parte en El Salvador y Honduras”, señala la publicación.
Si bien el tamaño de esa clase media uruguaya se redujo entre el año 2000 y 2010 –afectada fuertemente por la crisis de 2002–, muestra un importante crecimiento al tomar un período mayor y compararla con el año 1989.
El informe del Banco Mundial ordena a la población en cuatro grupos de acuerdo a su capacidad adquisitiva. Los pobres son aquellos que viven en hogares donde el ingreso diario es menor a US$ 4 por día per cápita. El segundo grupo es el de la población vulnerable, donde el ingreso va de US$ 10 a US$ 14 por día. En tanto, la clase media percibe entre US$ 10 y US$ 50 por integrante del hogar, mientras que la clase alta corresponde al grupo que cuenta con ingresos mayores a esa cifra.
Todos los valores están expresados a precios de 2005 y reflejan una paridad en el poder de compra (PPP) entre todos los países relevados –es decir, se toma una cotización tal que US$ 1 pueda adquirir la misma cantidad de bienes y servicios en Uruguay que en cualquiera de los demás países relevados–.
La movilidad social fue evidente en las últimas dos décadas. Mientras que en 1989 el 12,1% de los uruguayos era pobre, 20 años después esa proporción bajó a 4,5%. En tanto, la población vulnerable pasó de 37,8% a 21,1% de la población local.
Entre quienes eran pobres en 1989, 60% lograron abandonar su condición de pobreza y pasaron a una condición de vulnerabilidad. Sin embargo, solo 4% de los pobres lograron escalar a la clase media en Uruguay, según los datos procesados por los responsables del estudio.
En el caso de la población vulnerable hace 20 años, casi dos terceras partes (63%) hoy pertenece a la clase media o alta, mientras que menos de 1% cayó a la pobreza. Tampoco se detecta una caída por parte de la población media y alta. Apenas 0,2% mostró un deterioro de su condición socioeconómica que los llevó a nivel de ingresos de la población vulnerable.
“La mayor parte de la población que accedió a la clase media entre 1989 y 2009 en Uruguay se encontraba cerca del umbral de la clase media (US$ 10 PPP) en 1989. Una vez que accedieron a la clase media, la mayoría de ellos se situaron en la franja de US$ 10 – US$ 15 PPP al día”, explica el estudio.
Si bien los datos son auspiciosos en cuanto a la movilidad de las clases socioeconómicas más bajas, a nivel de la clase media lo que primó fue el estancamiento. Menos de 1% de las personas que se desplazaron de forma ascendente procedieron de la clase media.
Entre los menos móviles
Además, en la comparación regional, Uruguay no queda bien parado en cuanto al porcentaje de población que logró un ascenso socioeconómico. Mientras que a nivel local el porcentaje fue de 30%, solo Paraguay, Argentina, México y Venezuela muestran porcentajes menores que los locales.
Chile lidera el ránking con más de 60% de su población con movilidad ascendente. En Brasil, Colombia, Ecuador y Bolivia supera el 50%. En Perú es mayor al 40% y solo en Argentina, Venezuela y Paraguay, entre los países de América del Sur, hubo una movilidad menor que en Uruguay.
Según concluye el estudio, “la vulnerabilidad ante la pobreza sigue siendo una importante preocupación para la mayoría, y las políticas sociales seguirán jugando un rol importante en las vidas de muchos hogares en un futuro previsible”.
La emigración.
Dr. David Malowany.
Publicado en Identidad-Uruguay
Nuestros economistas festejan que nuestro país tenga una desocupación de un solo dígito. Lo que no se dice es que el gran factor que contribuyó a dicho indicador fue la emigración que durante cincuenta años soportó el mismo.
Según una Encuesta Nacional de Hogares realizada en 2006, el nueve por ciento de las madres entrevistadas tenían hijos que residían en el exterior. Estos se estiman en 478 mil personas ( Uruguay tiene una población de tres millones de personas). El 55 % de estos ciudadanos emigró entre 1996 y 2006[1].
Israel Wonsewer y Ana María Teja[2] explican que esta migración masiva difiere de la derivada de una presión de crecimiento demográfico (del tipo de la mexicana hacia EEUU, o de las fuerzas expulsoras de una migración marginal como el caso de Bolivia o Paraguay hacia Argentina). También es sustancialmente distinta de la tradicional emigración selectiva que buscaba su realización individual en un ambiente de gran ciudad como ser Buenos Aires.
Según una Encuesta Nacional de Hogares realizada en 2006, el nueve por ciento de las madres entrevistadas tenían hijos que residían en el exterior. Estos se estiman en 478 mil personas ( Uruguay tiene una población de tres millones de personas). El 55 % de estos ciudadanos emigró entre 1996 y 2006[1].
Israel Wonsewer y Ana María Teja[2] explican que esta migración masiva difiere de la derivada de una presión de crecimiento demográfico (del tipo de la mexicana hacia EEUU, o de las fuerzas expulsoras de una migración marginal como el caso de Bolivia o Paraguay hacia Argentina). También es sustancialmente distinta de la tradicional emigración selectiva que buscaba su realización individual en un ambiente de gran ciudad como ser Buenos Aires.
La expansión de la educación durante la década de los 50 y 60 orientada a capacitar a los jóvenes hacia los requerimientos del sector terciario[3], mas bien que para los sectores productores de bienes, conformó expectativas en los mismos en cuanto a su inserción en el mercado de trabajo y la búsqueda de ascenso social que no pudieron satisfacerse.
El hecho de contar con una fuerza de trabajo con un mayor nivel de instrucción, sin especialización, que enfrentaba una demanda de trabajo rígida, promovió la movilidad de la población activa fuera de fronteras. Un mayor número de años de instrucción facilita rápidos reciclajes.
La orientación y nivel de la enseñanza recibida creó expectativas en la población en edad activa de incorporarse a funciones más selectivas acordes con su capacitación y en la medida que esas expectativas no fueron atendidas en el país, creó las condiciones para que se produzca un flujo de la población activa más capacitada hacia fuera de fronteras.
Un 20 % de los emigrantes son profesionales universitarios recibidos en Uruguay. Otro 33 % culminó la secundaria. El 77 % de los emigrantes no superaba los 34 años. Quienes emigraron entonces, se trataba de personas que recién se incorporaban a la vida económica, hombres de nivel educativo superior, lo que les otorgó ciertas facilidades para incorporarse en las actividades productivas en el lugar de destino. La mayoría de los emigrantes eran empleados del sector privado. Solo el 6.2 % de los funcionarios públicos, dejó su apreciado empleo para aventurarse en otro país.
El hecho de contar con una fuerza de trabajo con un mayor nivel de instrucción, sin especialización, que enfrentaba una demanda de trabajo rígida, promovió la movilidad de la población activa fuera de fronteras. Un mayor número de años de instrucción facilita rápidos reciclajes.
La orientación y nivel de la enseñanza recibida creó expectativas en la población en edad activa de incorporarse a funciones más selectivas acordes con su capacitación y en la medida que esas expectativas no fueron atendidas en el país, creó las condiciones para que se produzca un flujo de la población activa más capacitada hacia fuera de fronteras.
Un 20 % de los emigrantes son profesionales universitarios recibidos en Uruguay. Otro 33 % culminó la secundaria. El 77 % de los emigrantes no superaba los 34 años. Quienes emigraron entonces, se trataba de personas que recién se incorporaban a la vida económica, hombres de nivel educativo superior, lo que les otorgó ciertas facilidades para incorporarse en las actividades productivas en el lugar de destino. La mayoría de los emigrantes eran empleados del sector privado. Solo el 6.2 % de los funcionarios públicos, dejó su apreciado empleo para aventurarse en otro país.
La emigración uruguaya estuvo integrada en su mayor parte por grupos familiares completos con edades que no pasaban de la edad antedicha. Quiere decir que el grupo emigratorio se reclutó preponderantemente en los tramos de las edades de la población que presentaban las tasas más altas de fecundidad. El mismo trasladaba al exterior un crecimiento natural importante, que se restaba al volumen absoluto que potencialmente se produciría en el país, de no haber emigración. Si bien existe una tendencia natural de la estructura que tiende a dicho envejecimiento, el mismo se acentúa mucho más cuando interviene dicho saldo. A la par de reducir a menos de la mitad el crecimiento esperado ( sin migración internacional) por su selectividad en cuanto a edad y sexo, determina tendencias de envejecimiento y desequilibrio a nivel de las estructuras según dichas variables. Esto genera el problema de saber si es posible que la labor de 3.3 personas alcance a generar un ingreso que sirva para mantener a una persona pasiva, además de generar toda la riqueza requerida para el mantenimiento del consumo actual y la expansión de la economía, considerando además, que el envejecimiento de la población activa incide en el deterioro de la productividad.
Los uruguayos no fueron en su mayoría lejos. Argentina absorbió la mitad del flujo emigratorio entre 1970 y 1990, aunque luego de esa fecha, el 70 % de los emigrantes se dirigieron hacia España o EEUU. La emigración hacia estos y otros destinos lejanos ha demostrado estar compuesta por personas del mayor nivel educativo.
Los uruguayos no fueron en su mayoría lejos. Argentina absorbió la mitad del flujo emigratorio entre 1970 y 1990, aunque luego de esa fecha, el 70 % de los emigrantes se dirigieron hacia España o EEUU. La emigración hacia estos y otros destinos lejanos ha demostrado estar compuesta por personas del mayor nivel educativo.
Expresaba Israel Wonsewer en 1985:
Los uruguayos no perciben la trascendencia de lo que ha ocurrido. Quizás en las nuevas concepciones neo-liberales que impregnan el pensamiento económico actual se acepte la emigración como un mal necesario, como una salida para restablecer o contribuir a restablecer un equilibrio para un país más reducido aún en sus posibilidades y aspiraciones de futuro. Tal vez la perspectiva del tiempo aun no da un panorama integral de la intensidad del fenómeno y sus efectos sobre el futuro. Un país vacío, de crecimiento demográfico escaso, perdió casi un veinte por ciento de población económicamente activa.
(Publicado en Mensuario Identidad).
[1] Informe sobre migración internacional en base a los datos recogidos en el módulo migración, Daniel Macadar y Adela Pellegrino, Encuesta Nacional de Hogares Ampliadas, año 2006.
[2] La emigración uruguaya 1963-1975, Israel Wonsewer, Ana María Teja, Ediciones de la Banda Oriental 1985.
[3] Veáse, según la página Web del Instituto Nacional de Estadística y Censos el 21 % de la población empleada trabaja en Comercio, Hoteles y Restaurantes, el 6.1 % en la enseñanza, 7.5 % en la Salud, 6.3 % en la Administración Pública y el ejercito, el 7.8 % son empleadas domésticas. En conclusión, sumando pesca, industria manufacturera, minería, ganadería, agricultura y construcción solo suman el 18 % de los empleos.
Video : La emigración uruguaya ( 2007)
Los uruguayos no perciben la trascendencia de lo que ha ocurrido. Quizás en las nuevas concepciones neo-liberales que impregnan el pensamiento económico actual se acepte la emigración como un mal necesario, como una salida para restablecer o contribuir a restablecer un equilibrio para un país más reducido aún en sus posibilidades y aspiraciones de futuro. Tal vez la perspectiva del tiempo aun no da un panorama integral de la intensidad del fenómeno y sus efectos sobre el futuro. Un país vacío, de crecimiento demográfico escaso, perdió casi un veinte por ciento de población económicamente activa.
(Publicado en Mensuario Identidad).
[1] Informe sobre migración internacional en base a los datos recogidos en el módulo migración, Daniel Macadar y Adela Pellegrino, Encuesta Nacional de Hogares Ampliadas, año 2006.
[2] La emigración uruguaya 1963-1975, Israel Wonsewer, Ana María Teja, Ediciones de la Banda Oriental 1985.
[3] Veáse, según la página Web del Instituto Nacional de Estadística y Censos el 21 % de la población empleada trabaja en Comercio, Hoteles y Restaurantes, el 6.1 % en la enseñanza, 7.5 % en la Salud, 6.3 % en la Administración Pública y el ejercito, el 7.8 % son empleadas domésticas. En conclusión, sumando pesca, industria manufacturera, minería, ganadería, agricultura y construcción solo suman el 18 % de los empleos.
Video : La emigración uruguaya ( 2007)
Las Palomas del Polonio y el Judío Salomón.
Por Pedro Leandro Ipuche.
I-
A principios del siglo pasado ( Siglo XVIII) naufragó en las costas del Polonio un barco pirata.
Nadie pudo enterarse enseguida de la catástrofe, debido a lo desolado de aquellas regiones oceánicas.
Parece que el naufragio se produjo a consecuencia de un choque en las restingas o piedras ocultas que forman una cadena inmersa que se prolonga hasta la afloración roquera de la playa salvaje.
En el barco venía mucha gente filibustera y de bastante fortuna. Porque los tripulantes eran tipos de asalto y despojo que se habían surtido caudalosamente en ciudades desguarnecidas y consumando hazañas feroces de abordaje.
La nave, quebrada y vencida, se hundió con todos sus tesoros y con casi todos los personajes de servicio.
Unicamente se salvó – a la vista- un judío veneciano que venía en calidad de mercader asegurado.
Lo habían sorprendido en una barca solitaria de contrabando en el Adriático occidental. Y se lo habían copado con joyas, sedas, especias, semillas y...palomas.
El pánico de los piratas de ser aprehendidos en la costa por el tremebundo alcalde ordinario de Maldonado, los empujó a la dispersión natatoria y al suicidio colectivo, hundiéndose los leales con la precita embarcación.
Les convenía más ser tragados por las aguas o los tiburones, que verse colgados de la soga de esparto en la sumatoria horca española del Pero Crespo Fernandino.
El Judío, braceando y agarrándose a trozos flotantes del desastre, consiguió afirmarse en una peña batida por el verde oleaje rochense.
Después de un repuesto cálculo de distancia y posibilidades, logró ganar la arena, a la que fue medio botado por las furiosas espumas del avance costero.
A principios del siglo pasado ( Siglo XVIII) naufragó en las costas del Polonio un barco pirata.
Nadie pudo enterarse enseguida de la catástrofe, debido a lo desolado de aquellas regiones oceánicas.
Parece que el naufragio se produjo a consecuencia de un choque en las restingas o piedras ocultas que forman una cadena inmersa que se prolonga hasta la afloración roquera de la playa salvaje.
En el barco venía mucha gente filibustera y de bastante fortuna. Porque los tripulantes eran tipos de asalto y despojo que se habían surtido caudalosamente en ciudades desguarnecidas y consumando hazañas feroces de abordaje.
La nave, quebrada y vencida, se hundió con todos sus tesoros y con casi todos los personajes de servicio.
Unicamente se salvó – a la vista- un judío veneciano que venía en calidad de mercader asegurado.
Lo habían sorprendido en una barca solitaria de contrabando en el Adriático occidental. Y se lo habían copado con joyas, sedas, especias, semillas y...palomas.
El pánico de los piratas de ser aprehendidos en la costa por el tremebundo alcalde ordinario de Maldonado, los empujó a la dispersión natatoria y al suicidio colectivo, hundiéndose los leales con la precita embarcación.
Les convenía más ser tragados por las aguas o los tiburones, que verse colgados de la soga de esparto en la sumatoria horca española del Pero Crespo Fernandino.
El Judío, braceando y agarrándose a trozos flotantes del desastre, consiguió afirmarse en una peña batida por el verde oleaje rochense.
Después de un repuesto cálculo de distancia y posibilidades, logró ganar la arena, a la que fue medio botado por las furiosas espumas del avance costero.
II-
Nos conviene declarar ahora que el judío sobreviviente se llamaba Salomón.
Entró, como pudo, después de orearse bien los trapos, en el villorrio de Nuestra Señora de los Remedios.
Y allí fue socorrido por la ancha hospitalidad de los vecinos, a quienes contó, como le pareció más eficaz, los últimos pasos de su vida.
Aquella placida gente, de levadura aldeana y de buen humor patriarcal, admitió en la vecindad al desvalido Salomón, en quien tuvieron motivo cotidiano de entretenimiento exótico.
Vivió algunos años Salomón en el pueblo esteño, sin complicaciones ni disgustos, pues supo aguantar la continua zumba de los que se reían de su idioma, de su nariz, de su galerón, de sus anteojos, de su paraguas y de sus costumbres estrafalarias.
Muy pobre, azorado, buen trabajador, pacífico por completo, con una voz salmódica , con su sonrisa barbada..., un día empezaron a notar los vecinos un cambio grandioso, sobremanera intrigante, en el forastero.
Se había enfundado en un levitón rabínico flamante, se hizo de un bastón de categoría, se armó de una Biblia hebrea, y se dio a una vida de hombre repentinamente rumboso.
En el paso real del arroyo Rocha apareció una mañana cierta góndola, dando un vaivén fotográfico a la corriente. Era de Salomón.
Una tarde recorrió las calles del poblacho, manejando una sopanda de paseo.
No paró ahí la cosa. Haciendo un derroche agresivo de dinero, compró la finca más peripuesta del cogollo poblado sobre la mismísima plaza perimetral.
La gente- impresionada- no sabía a qué atribuir tan insólita transformación.
Hasta que un día vino a saberse que Salomón tenía monedas de oro de toda procedencia, tamaño y valor.
La población se dio a magnificar la referencia.
Creyeron todos hallarse en presencia de un milagro.
Nos conviene declarar ahora que el judío sobreviviente se llamaba Salomón.
Entró, como pudo, después de orearse bien los trapos, en el villorrio de Nuestra Señora de los Remedios.
Y allí fue socorrido por la ancha hospitalidad de los vecinos, a quienes contó, como le pareció más eficaz, los últimos pasos de su vida.
Aquella placida gente, de levadura aldeana y de buen humor patriarcal, admitió en la vecindad al desvalido Salomón, en quien tuvieron motivo cotidiano de entretenimiento exótico.
Vivió algunos años Salomón en el pueblo esteño, sin complicaciones ni disgustos, pues supo aguantar la continua zumba de los que se reían de su idioma, de su nariz, de su galerón, de sus anteojos, de su paraguas y de sus costumbres estrafalarias.
Muy pobre, azorado, buen trabajador, pacífico por completo, con una voz salmódica , con su sonrisa barbada..., un día empezaron a notar los vecinos un cambio grandioso, sobremanera intrigante, en el forastero.
Se había enfundado en un levitón rabínico flamante, se hizo de un bastón de categoría, se armó de una Biblia hebrea, y se dio a una vida de hombre repentinamente rumboso.
En el paso real del arroyo Rocha apareció una mañana cierta góndola, dando un vaivén fotográfico a la corriente. Era de Salomón.
Una tarde recorrió las calles del poblacho, manejando una sopanda de paseo.
No paró ahí la cosa. Haciendo un derroche agresivo de dinero, compró la finca más peripuesta del cogollo poblado sobre la mismísima plaza perimetral.
La gente- impresionada- no sabía a qué atribuir tan insólita transformación.
Hasta que un día vino a saberse que Salomón tenía monedas de oro de toda procedencia, tamaño y valor.
La población se dio a magnificar la referencia.
Creyeron todos hallarse en presencia de un milagro.
III-
¿ Que había pasado?
Una mañana entraron al pueblo cuatro pescadores aventureros. Y derramaron la vibración contagiosa de un descubrimiento.
Sobre las costas del Cabo Polonio se había formado una isla vasta y espesa. Parecía haber surgido de algún cataclismo. La verdad era que nadie andaba por allí.
Pero la aparición de la Isla fue tema de misterio. Sobre todo, porque de su interior, como si soplaran un caracol de las primeras edades del mundo, salía un gemido fúsil de una cantidad ínsita de palomas que, por el volumen de la masa melódica, debía de ser fantásticamente numerosa.
Conforme llegó a oídos de Salomón la nueva de la isla y la denuncia columbina, se acordó de la pequeña fortuna que traía en la nave desaparecida.
El dato de las palomas le tocó en lo más entrañoso y herido de sus recuerdos. Aquellas aves habían sido como hijas suyas. El hervor tornátil y alado era la fascinante atención y alivio de sus últimos días de mercader atrapado...
No aguardó mucho tiempo para encaminarse al sitio del naufragio.
Al cabo de un par de días de peregrinación disimulada, alcanzó una tarde a vislumbrar desde una altura óptica, la isla de procedencia taumatúrgica.
Era cierto. Allí estaba el cuerpo vegetal, asentado en el mismo espacio trágico donde tropezó y zozobró el barco.
Se aligero de ropas. Y se arrojó al agua.
Conforme puso el pie en la isla, se desató el gemido helicoidal, imponente de las palomas.
Empezó a caminar en dirección a la sonoridad.
Anduvo, anduvo. Hasta que, de golpe, se vió envuelto y rozado por sus palomas venecianas.
¡ Eran las mismas! ¡ Cómo se hicieron reconocer! ¡ Qué manera de festejar el encuentro con su viejo dueño!
Aquella isla, por lo que atinó a deducir, había sido plantada por sus hijas voladoras. Con seguridad, supieron aprovechar y desparramar las semillas que él traía...
La isla se había arraigado y afirmado en las restingas y en las hendijas de la nave. Y ofrecía el símbolo y la simbiosis de una detenida barca vegetal.
Cuando Salomón intento regresar a la playa, las palomas se le colocaron delante. Y lo condujeron al corazón de la Isla, donde se hallaba el mástil central de la barca sumergida.
Descendieron a una cavidad formada por una caja del piso rocoso contra el palo mayor. Y le indicaron que mirara aquello. Y buscara algo...
Salomón se topó con el tesoro del barco, perfectamente alojado y salvo, cubierto, apenitas, por una agua leve, alegre, hialina...
Tomó un puñado de monedas. Y regresó a la costa, prometiéndole a las palomas – a sus hijitas venecianas- visitarlas a menudo...
¿ Que había pasado?
Una mañana entraron al pueblo cuatro pescadores aventureros. Y derramaron la vibración contagiosa de un descubrimiento.
Sobre las costas del Cabo Polonio se había formado una isla vasta y espesa. Parecía haber surgido de algún cataclismo. La verdad era que nadie andaba por allí.
Pero la aparición de la Isla fue tema de misterio. Sobre todo, porque de su interior, como si soplaran un caracol de las primeras edades del mundo, salía un gemido fúsil de una cantidad ínsita de palomas que, por el volumen de la masa melódica, debía de ser fantásticamente numerosa.
Conforme llegó a oídos de Salomón la nueva de la isla y la denuncia columbina, se acordó de la pequeña fortuna que traía en la nave desaparecida.
El dato de las palomas le tocó en lo más entrañoso y herido de sus recuerdos. Aquellas aves habían sido como hijas suyas. El hervor tornátil y alado era la fascinante atención y alivio de sus últimos días de mercader atrapado...
No aguardó mucho tiempo para encaminarse al sitio del naufragio.
Al cabo de un par de días de peregrinación disimulada, alcanzó una tarde a vislumbrar desde una altura óptica, la isla de procedencia taumatúrgica.
Era cierto. Allí estaba el cuerpo vegetal, asentado en el mismo espacio trágico donde tropezó y zozobró el barco.
Se aligero de ropas. Y se arrojó al agua.
Conforme puso el pie en la isla, se desató el gemido helicoidal, imponente de las palomas.
Empezó a caminar en dirección a la sonoridad.
Anduvo, anduvo. Hasta que, de golpe, se vió envuelto y rozado por sus palomas venecianas.
¡ Eran las mismas! ¡ Cómo se hicieron reconocer! ¡ Qué manera de festejar el encuentro con su viejo dueño!
Aquella isla, por lo que atinó a deducir, había sido plantada por sus hijas voladoras. Con seguridad, supieron aprovechar y desparramar las semillas que él traía...
La isla se había arraigado y afirmado en las restingas y en las hendijas de la nave. Y ofrecía el símbolo y la simbiosis de una detenida barca vegetal.
Cuando Salomón intento regresar a la playa, las palomas se le colocaron delante. Y lo condujeron al corazón de la Isla, donde se hallaba el mástil central de la barca sumergida.
Descendieron a una cavidad formada por una caja del piso rocoso contra el palo mayor. Y le indicaron que mirara aquello. Y buscara algo...
Salomón se topó con el tesoro del barco, perfectamente alojado y salvo, cubierto, apenitas, por una agua leve, alegre, hialina...
Tomó un puñado de monedas. Y regresó a la costa, prometiéndole a las palomas – a sus hijitas venecianas- visitarlas a menudo...
IV-
Como la gente rochense notará que el auge monetario y suntuoso de Salomón era una consecuencia de los viajes sigilosos que solía realizar, resolvieron hacerlo seguir y vigilar por un indiecito vivísimo, especializado en pesquisas de contrabando y aclaraciones de robos ingeniosos.
No convenía tomar en cuenta sus viajes a Montevideo, a Buenos Aires y ciertos pueblos del norte brasileño de donde se traía el boato, el oropel, los libros y las valijas y en envases de lienzos y bultos. No.
Había que observar aquellos desplazamientos hacia los acantilados del Polonio. De allí debía proceder, sin duda, el surtido aurífero y las monedas.
El indiecito, a quien le fuera encomendada la misión estratégica, regresó un día con la explicación ocular y auditiva del prodigio.
Salomón dejaba su vehículo de viaje en un espacio de reparo que había establecido en las altas rocas alternada.
Sacaba un botecito. Y sentándose en el listón del medio, se ponía a remar en dirección a la isla, donde se emitía un canto ajustado que desde la playa se podía escuchar.
Al anochecer, retornaba a los peñascos protectores de su sopanda.
A poco de encontrarse en el villorrio, saltaban de su faltriquera monedas encandilantes de oro, del tamaño y el tiempo que le exigieran.
La gente de Rocha usaba un buen humor accional y pintoresco.
Se pusieron de acuerdo unos cuantos vecinos curiosos. Y combinaron una expedición por agua para ganar la isla desde las mismas entradas oceánicas.
Salieron una mañana entre bromas y promesas alucinantes.
Cuando venían acercándose al escenario silvano del naufragio y la fortuna, un gemido polifónico, de un inmenso caracol girante, que llenaba la isla, los atrajo y hechizó con auditiva intriga y ansiedad.
Entraron en ella. La volvieron y revolvieron toda.
No hallaron nada. Ni escondrijos, ni restos náufragos, ni monedas...ni palomas.
¿ De dónde podría sacar Salomón el tesoro reiterativo que exhibía en el pueblo de Nuestra Señora de los Remedios?
¿ Dónde estaban aquellas palomas que rebasaban con el zumbo de su monodia los límites isleños?
Como la gente rochense notará que el auge monetario y suntuoso de Salomón era una consecuencia de los viajes sigilosos que solía realizar, resolvieron hacerlo seguir y vigilar por un indiecito vivísimo, especializado en pesquisas de contrabando y aclaraciones de robos ingeniosos.
No convenía tomar en cuenta sus viajes a Montevideo, a Buenos Aires y ciertos pueblos del norte brasileño de donde se traía el boato, el oropel, los libros y las valijas y en envases de lienzos y bultos. No.
Había que observar aquellos desplazamientos hacia los acantilados del Polonio. De allí debía proceder, sin duda, el surtido aurífero y las monedas.
El indiecito, a quien le fuera encomendada la misión estratégica, regresó un día con la explicación ocular y auditiva del prodigio.
Salomón dejaba su vehículo de viaje en un espacio de reparo que había establecido en las altas rocas alternada.
Sacaba un botecito. Y sentándose en el listón del medio, se ponía a remar en dirección a la isla, donde se emitía un canto ajustado que desde la playa se podía escuchar.
Al anochecer, retornaba a los peñascos protectores de su sopanda.
A poco de encontrarse en el villorrio, saltaban de su faltriquera monedas encandilantes de oro, del tamaño y el tiempo que le exigieran.
La gente de Rocha usaba un buen humor accional y pintoresco.
Se pusieron de acuerdo unos cuantos vecinos curiosos. Y combinaron una expedición por agua para ganar la isla desde las mismas entradas oceánicas.
Salieron una mañana entre bromas y promesas alucinantes.
Cuando venían acercándose al escenario silvano del naufragio y la fortuna, un gemido polifónico, de un inmenso caracol girante, que llenaba la isla, los atrajo y hechizó con auditiva intriga y ansiedad.
Entraron en ella. La volvieron y revolvieron toda.
No hallaron nada. Ni escondrijos, ni restos náufragos, ni monedas...ni palomas.
¿ De dónde podría sacar Salomón el tesoro reiterativo que exhibía en el pueblo de Nuestra Señora de los Remedios?
¿ Dónde estaban aquellas palomas que rebasaban con el zumbo de su monodia los límites isleños?
Misterio enorme, sin acertijo. Pues aunque no se veían las palomas, las palomas existían. ... SE VEIAN CON EL OIDO...
¿ Quién iba a producir el gimoteo inconfundible, actuante, coral?
Entonces...lo de las monedas...
¿ no tendría algo que ver con esta columbina ocultación sonora? ¿ No sería, el mismo recelo?
Tal vez las monedas fueran dinero con destino secreto, intencionado. Tesoro que solamente Salomón tendría el privilegio de poder ver y disfrutar...
Con estas cavilosidades regresaban.
De golpe, se agitó el Polonio arisco.
Sacudió sus parcelas peligrosas, sus moles azogadas de engullimiento.
Como indignado por una profanación imperdonable, tomó reciamente por los costados la barca de los expedicionario noveleros. Y la hundió con la cerrada furia de sus manazas.
¿ Quién iba a producir el gimoteo inconfundible, actuante, coral?
Entonces...lo de las monedas...
¿ no tendría algo que ver con esta columbina ocultación sonora? ¿ No sería, el mismo recelo?
Tal vez las monedas fueran dinero con destino secreto, intencionado. Tesoro que solamente Salomón tendría el privilegio de poder ver y disfrutar...
Con estas cavilosidades regresaban.
De golpe, se agitó el Polonio arisco.
Sacudió sus parcelas peligrosas, sus moles azogadas de engullimiento.
Como indignado por una profanación imperdonable, tomó reciamente por los costados la barca de los expedicionario noveleros. Y la hundió con la cerrada furia de sus manazas.
V.
Durante mucho tiempo, hubo un encogimiento aislante hacia la isla del Polonio.
Estaba visto que el cabo oceánico castigaba con sus corcovos de absorción la curiosidad de los que vinieran a enterarse del tesoro de los piratas y de las palomas invisibles.
Un día desapareció Salomón.
Con los años, se fue desvaneciendo el miedo tradicional.
Barcos, turistas, vecinos, se fueron acostumbrando a las lejanas mentas de la zona embrujada.
Lo cierto es que nadie consiguió nunca ver las palomas del Polonio. Nadie pudo sacar una moneda de allí.
Todavía a fines del siglo XIX había sobrevivientes en el pueblo de Rocha que aseguraban : que si alguien aplicara con intención crédula las orejas hacia la Isla del Polonio, podría oir desde la costa – medrosa retentiva, trascendente retintín- el treno de las palomas venecianas del judío Salomón.
Fin.
Almanaque del Banco de Seguros del Estado. Año 1955.
Durante mucho tiempo, hubo un encogimiento aislante hacia la isla del Polonio.
Estaba visto que el cabo oceánico castigaba con sus corcovos de absorción la curiosidad de los que vinieran a enterarse del tesoro de los piratas y de las palomas invisibles.
Un día desapareció Salomón.
Con los años, se fue desvaneciendo el miedo tradicional.
Barcos, turistas, vecinos, se fueron acostumbrando a las lejanas mentas de la zona embrujada.
Lo cierto es que nadie consiguió nunca ver las palomas del Polonio. Nadie pudo sacar una moneda de allí.
Todavía a fines del siglo XIX había sobrevivientes en el pueblo de Rocha que aseguraban : que si alguien aplicara con intención crédula las orejas hacia la Isla del Polonio, podría oir desde la costa – medrosa retentiva, trascendente retintín- el treno de las palomas venecianas del judío Salomón.
Fin.
Almanaque del Banco de Seguros del Estado. Año 1955.
. ISGLEAS / G. TERRA, El País , 8 de Julio de 2012.
Entre el 1° de marzo de 2010 y el 31 de diciembre de 2011 el gobierno del presidente José Mujica incorporó 12.671 funcionarios públicos y la cifra total se elevó a 264.078. Supera a los que había en 1995, cuando se prohibió el ingreso al Estado.
La prohibición de ingreso de funcionarios públicos permitió que entre 1995 y 2005 el Estado redujera en 29.852 trabajadores su plantilla. En 2005, el gobierno de Tabaré Vázquez, en su primera ley de Presupuesto, derogó la prohibición y reabrió las puertas de la administración pública. Desde ese momento el aumento de vínculos funcionales en el Estado no ha parado de crecer.
Entre 2005 y 2009 se crearon 23.232 nuevos vínculos laborales con el Estado, entre los que se cuentan funcionarios públicos y contratados en calidad de becarios, pasantes, arrendamiento de obra, etc.
Mujica asumió el gobierno con 264.957 dependientes del Estado (de los cuales 248.157 eran funcionarios públicos), cifra que en un año se elevó a 273.959 (9.002 más). El 2011 se cerró con 277.628 vínculos laborales. En ese año se incorporaron al Estado 3.669 dependientes que sumados a los ingresados durante 2010 totalizaron 12.671.
El aumento de la plantilla de dependientes en dos años de gobierno de Mujica corresponde a funcionarios públicos solamente, dado que la cifra de contratados bajo diversas modalidades se ha reducido.
En definitiva, entre el 1° de marzo de 2010 y el 31 de diciembre de 2011, el Estado incorporó 9.421 nuevos funcionarios públicos y dio la calidad de tal a 3.250 trabajadores que estaban contratados a término bajo otras modalidades.
La cifra de públicos asciende a 264.078 y supera a los 261.122 que había en 1995, cuando se prohibió el ingreso al Estado. Los trabajadores contratados son 13.550, mientras que en 2004 eran 12.271. En total, al 31 de diciembre de 2011 había 277.628 vínculos laborales (funcionarios y contratados) vigentes con el Estado.
Los datos están contenidos en el proyecto de Rendición de Cuentas enviado al Parlamento, que hace un balance de los gastos de 2011 y traza las perspectivas presupuestales para el año 2013, y que el martes 10 será explicado a los legisladores por el equipo económico.
En materia de recursos humanos, a través de distintas normas contenidas en la Rendición de Cuentas se suprimen 146 cargos y a la vez se crean otros 736, lo que da un saldo neto de 591 nuevos puestos de trabajo en el Estado con respecto al año 2011. Además, una norma habilita al Ministerio del Interior a establecer hasta 1.000 nuevos vínculos en forma de contratos. La comparecencia del ministro de Economía, Fernando Lorenzo, y de las autoridades de la Oficina Nacional del Servicio Civil (ONSC) ante las comisiones de Hacienda y Presupuesto de la Cámara de Representantes, servirá para que el diputado nacionalista Jorge Gandini pregunte acerca de la necesidad del aumento de los funcionarios, mientras "el tan anunciado Estatuto del Funcionario Público" sigue sin ser enviado al Parlamento, dijo el legislador.
"El presidente (José) Mujica habla de que haya menos burocracia; se queja de eso pero no hace nada. Al contrario, suma vínculos laborales al Estado", añadió el representante de Alianza Nacional.
El proyecto de Rendición de Cuentas incluye US$ 129 millones en materia de egresos para 2013, los cuales se adicionan a los US$ 150 millones ya previstos en el Presupuesto para ese mismo año.
CONTRATOS. Luego de repasar el contenido del informe macroeconómico que acompaña el proyecto de Rendición, el diputado nacionalista Pablo Abdala destacó el "divorcio" que existe entre el planteamiento de incertidumbre que el gobierno ha intentado trasmitir alertando sobre la situación de la zona Euro y Estados Unidos y la esperada desaceleración económica en la región que podría repercutir en Uruguay, con el incremento del gasto.
La Rendición de Cuentas incluye en varios Incisos la creación de cargos de asesoramiento a los ministerios, como en Trabajo, Turismo y Relaciones Exteriores. Se crea un cargo de confianza política en el Ministerio de Desarrollo Social para un director de Desarrollo Social; y se crean además los tres cargos de confianza política para el Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (Sirpa), pero sin que se descentralice del INAU, tal cual había anunciado el gobierno.
En la administración central hay 2.400 cargos temporales que se rigen por el Derecho Público. Son contratos que se arrastran desde 1990 y que se crearon a partir de la intención de que en el Estado hubiera una reestructura organizativa, lo cual nunca se llegó a concretar. Las experiencias piloto se aplicarían en los ministerios de Vivienda, Salud Pública, e Industria, a los cuales se iba a sumar el ministerio de Desarrollo Social, pero como las reestructuras no se concretaron, la precariedad laboral de esos 2.400 contratos continúa vigente.
Los contratos iban a desaparecer al vencer el plazo y por la instrumentación de la reforma del Estado, pero se han venido prorrogando sucesivamente al no cumplirse la tarea para la que fueron creados. En el último Presupuesto, esos contratos fueron prorrogados bajo la denominación de "contrataciones imprescindibles para las reestructuras organizativas".
Uno de los elementos que mejor describe la precariedad de algunas situaciones es lo que ocurre en el Mides, donde tres cuartas partes de los funcionarios son titulares de contratos laborales con ONG o fundaciones. El Mides ha tercerizado buena parte de sus cometidos, muchos de los cuales se han adjudicado en forma directa a cooperativas.
Además, por el artículo 7° del proyecto de Rendición de Cuentas se crea una comisión para asesorar al Poder Ejecutivo en cuanto a la remuneración de los funcionarios públicos en general y sin dar mayores detalles de si se trata de un marco para el nuevo Estatuto.
Legisladores de la oposición consultados por El País coincidieron en que esa definición "es de una enorme vaguedad" y que por eso se trata de un "artículo peligroso".
LAS CIFRAS23.232Aumento de los públicos y contratados durante el gobierno de Tabaré Vázquez, que derogó la prohibición de ingreso al Estado.
35.903Cantidad de públicos y contratados que sumó el Estado desde 2005, año en que fue derogada la prohibición de ingreso.
Seis de cada diez pesos se destinan a salariosEn el Estado el peso del gasto en salarios es significativamente mayor al de rubros como inversiones o funcionamiento. Durante 2011, seis de cada diez pesos gastados fueron destinados a remuneraciones en la Administración Central y los organismos del artículo 220. La Rendición de Cuentas enviada al Parlamento destaca que "incluso en el último año se incrementó el peso de las remuneraciones, debido a las asignaciones incrementales establecidas en la última Ley de Presupuesto, destacándose la incidencia de los aumentos en la masa salarial de los organismos de la educación y del Ministerio del Interior asociados a las prioridades establecidas en materia de educación y seguridad, servicios intensivos en recursos humanos". De toda la masa de dinero disponible, los gastos de funcionamiento representan un 26% y las inversiones un 14%. La Rendición de Cuentas incluye partidas salariales con vigencia al 1° de enero de 2013. Del incremento de $ 2.807 millones previsto, casi $ 1.000 millones son para salarios.
En el Ministerio de Defensa se destinan $ 80 millones de pesos íntegramente para compensaciones y creación de cargos. La mayor partida salarial es para ASSE, a la que se le otorgan $ 700 millones del total de $ 757 millones asignados. En el Ministerio del Interior se destinan $ 126 millones para recursos humanos.
El País Digital
Entre el 1° de marzo de 2010 y el 31 de diciembre de 2011 el gobierno del presidente José Mujica incorporó 12.671 funcionarios públicos y la cifra total se elevó a 264.078. Supera a los que había en 1995, cuando se prohibió el ingreso al Estado.
La prohibición de ingreso de funcionarios públicos permitió que entre 1995 y 2005 el Estado redujera en 29.852 trabajadores su plantilla. En 2005, el gobierno de Tabaré Vázquez, en su primera ley de Presupuesto, derogó la prohibición y reabrió las puertas de la administración pública. Desde ese momento el aumento de vínculos funcionales en el Estado no ha parado de crecer.
Entre 2005 y 2009 se crearon 23.232 nuevos vínculos laborales con el Estado, entre los que se cuentan funcionarios públicos y contratados en calidad de becarios, pasantes, arrendamiento de obra, etc.
Mujica asumió el gobierno con 264.957 dependientes del Estado (de los cuales 248.157 eran funcionarios públicos), cifra que en un año se elevó a 273.959 (9.002 más). El 2011 se cerró con 277.628 vínculos laborales. En ese año se incorporaron al Estado 3.669 dependientes que sumados a los ingresados durante 2010 totalizaron 12.671.
El aumento de la plantilla de dependientes en dos años de gobierno de Mujica corresponde a funcionarios públicos solamente, dado que la cifra de contratados bajo diversas modalidades se ha reducido.
En definitiva, entre el 1° de marzo de 2010 y el 31 de diciembre de 2011, el Estado incorporó 9.421 nuevos funcionarios públicos y dio la calidad de tal a 3.250 trabajadores que estaban contratados a término bajo otras modalidades.
La cifra de públicos asciende a 264.078 y supera a los 261.122 que había en 1995, cuando se prohibió el ingreso al Estado. Los trabajadores contratados son 13.550, mientras que en 2004 eran 12.271. En total, al 31 de diciembre de 2011 había 277.628 vínculos laborales (funcionarios y contratados) vigentes con el Estado.
Los datos están contenidos en el proyecto de Rendición de Cuentas enviado al Parlamento, que hace un balance de los gastos de 2011 y traza las perspectivas presupuestales para el año 2013, y que el martes 10 será explicado a los legisladores por el equipo económico.
En materia de recursos humanos, a través de distintas normas contenidas en la Rendición de Cuentas se suprimen 146 cargos y a la vez se crean otros 736, lo que da un saldo neto de 591 nuevos puestos de trabajo en el Estado con respecto al año 2011. Además, una norma habilita al Ministerio del Interior a establecer hasta 1.000 nuevos vínculos en forma de contratos. La comparecencia del ministro de Economía, Fernando Lorenzo, y de las autoridades de la Oficina Nacional del Servicio Civil (ONSC) ante las comisiones de Hacienda y Presupuesto de la Cámara de Representantes, servirá para que el diputado nacionalista Jorge Gandini pregunte acerca de la necesidad del aumento de los funcionarios, mientras "el tan anunciado Estatuto del Funcionario Público" sigue sin ser enviado al Parlamento, dijo el legislador.
"El presidente (José) Mujica habla de que haya menos burocracia; se queja de eso pero no hace nada. Al contrario, suma vínculos laborales al Estado", añadió el representante de Alianza Nacional.
El proyecto de Rendición de Cuentas incluye US$ 129 millones en materia de egresos para 2013, los cuales se adicionan a los US$ 150 millones ya previstos en el Presupuesto para ese mismo año.
CONTRATOS. Luego de repasar el contenido del informe macroeconómico que acompaña el proyecto de Rendición, el diputado nacionalista Pablo Abdala destacó el "divorcio" que existe entre el planteamiento de incertidumbre que el gobierno ha intentado trasmitir alertando sobre la situación de la zona Euro y Estados Unidos y la esperada desaceleración económica en la región que podría repercutir en Uruguay, con el incremento del gasto.
La Rendición de Cuentas incluye en varios Incisos la creación de cargos de asesoramiento a los ministerios, como en Trabajo, Turismo y Relaciones Exteriores. Se crea un cargo de confianza política en el Ministerio de Desarrollo Social para un director de Desarrollo Social; y se crean además los tres cargos de confianza política para el Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente (Sirpa), pero sin que se descentralice del INAU, tal cual había anunciado el gobierno.
En la administración central hay 2.400 cargos temporales que se rigen por el Derecho Público. Son contratos que se arrastran desde 1990 y que se crearon a partir de la intención de que en el Estado hubiera una reestructura organizativa, lo cual nunca se llegó a concretar. Las experiencias piloto se aplicarían en los ministerios de Vivienda, Salud Pública, e Industria, a los cuales se iba a sumar el ministerio de Desarrollo Social, pero como las reestructuras no se concretaron, la precariedad laboral de esos 2.400 contratos continúa vigente.
Los contratos iban a desaparecer al vencer el plazo y por la instrumentación de la reforma del Estado, pero se han venido prorrogando sucesivamente al no cumplirse la tarea para la que fueron creados. En el último Presupuesto, esos contratos fueron prorrogados bajo la denominación de "contrataciones imprescindibles para las reestructuras organizativas".
Uno de los elementos que mejor describe la precariedad de algunas situaciones es lo que ocurre en el Mides, donde tres cuartas partes de los funcionarios son titulares de contratos laborales con ONG o fundaciones. El Mides ha tercerizado buena parte de sus cometidos, muchos de los cuales se han adjudicado en forma directa a cooperativas.
Además, por el artículo 7° del proyecto de Rendición de Cuentas se crea una comisión para asesorar al Poder Ejecutivo en cuanto a la remuneración de los funcionarios públicos en general y sin dar mayores detalles de si se trata de un marco para el nuevo Estatuto.
Legisladores de la oposición consultados por El País coincidieron en que esa definición "es de una enorme vaguedad" y que por eso se trata de un "artículo peligroso".
LAS CIFRAS23.232Aumento de los públicos y contratados durante el gobierno de Tabaré Vázquez, que derogó la prohibición de ingreso al Estado.
35.903Cantidad de públicos y contratados que sumó el Estado desde 2005, año en que fue derogada la prohibición de ingreso.
Seis de cada diez pesos se destinan a salariosEn el Estado el peso del gasto en salarios es significativamente mayor al de rubros como inversiones o funcionamiento. Durante 2011, seis de cada diez pesos gastados fueron destinados a remuneraciones en la Administración Central y los organismos del artículo 220. La Rendición de Cuentas enviada al Parlamento destaca que "incluso en el último año se incrementó el peso de las remuneraciones, debido a las asignaciones incrementales establecidas en la última Ley de Presupuesto, destacándose la incidencia de los aumentos en la masa salarial de los organismos de la educación y del Ministerio del Interior asociados a las prioridades establecidas en materia de educación y seguridad, servicios intensivos en recursos humanos". De toda la masa de dinero disponible, los gastos de funcionamiento representan un 26% y las inversiones un 14%. La Rendición de Cuentas incluye partidas salariales con vigencia al 1° de enero de 2013. Del incremento de $ 2.807 millones previsto, casi $ 1.000 millones son para salarios.
En el Ministerio de Defensa se destinan $ 80 millones de pesos íntegramente para compensaciones y creación de cargos. La mayor partida salarial es para ASSE, a la que se le otorgan $ 700 millones del total de $ 757 millones asignados. En el Ministerio del Interior se destinan $ 126 millones para recursos humanos.
El País Digital
L.BALDOMIR / A. DE LOS REYES
La pobreza y la indigencia tuvieron una fuerte caída en 2011 frente al año anterior, según el Instituto Nacional de Estadística. En Montevideo, marcan la brecha los ingresos por $ 7.953, debajo de los cuales se es considerado pobre.
El número de personas pobres en Uruguay disminuyó fuertemente en 2011, cayendo 4,9 puntos porcentuales (p.p.) respecto al año anterior, consolidándose un continuo descenso de la pobreza desde 2006, según el estudio "Estimaciones de Pobreza por el método del Ingreso 2011" publicado ayer por el INE. Se trata de la mayor caída al menos desde los 80 según los registros oficiales.
Así, mientras que los pobres representaban el 18,6% de la población en 2010, en 2011 esta cifra cayó a 13,7%. Según se desprende de las cifras del INE, la cantidad de personas pobres se estimó en 461.498 en 2011, lo que implica una reducción de 162.827 menos respecto al año previo, esto es, casi tres estadios Centenarios. La baja es aún más marcada que la de 2010, cuando la pobreza retrocedió 2,3 p.p., o lo que es lo mismo, 74.767 personas dejaron de ser pobres ese año.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Olesker, dijo a El País que en la "impactante" baja incidió "fuertemente" la política salarial tanto por "el aumento del salario mínimo" como por "el incremento que tuvieron los mínimos salariales por ramas de actividad". "El segundo factor fue el empleo y la mayor formalidad si se tiene en cuenta que hay estudios que reflejan que entre un puesto formal y uno informal hay una brecha salarial del 30%".
A esto se le suman políticas sociales específicas, muchas de las cuales se intensificaron con la vigencia del presupuesto de 2011, dijo Olesker.
Hoy, la línea de pobreza determinada por la canasta básica alimentaria más una canasta básica no alimentaria se encuentra en $ 7.953 para un hogar unipersonal de Montevideo, $ 5.329 para el interior urbano y $3.545 para el interior rural.
El dato no es menor si se toma en cuenta que el salario mínimo nacional fue fijado para este año en $ 7.200.
Según Olesker el incremento de 20% en el salario mínimo que se dio en 2012 sumado a "cómo incidan los nuevos ajustes en las bases por rama de los convenios salariales que vencen en julio" va a incidir seguramente en una "nueva baja de la pobreza" para este año.
"La meta para 2014 es llevarla a 9,99%; faltan 3,7 puntos por lo que no estamos lejos", dijo.
Con respecto a la distribución de la pobreza por área, se constató una mayor proporción en Montevideo (16,7%) y en las áreas urbanas del interior con menos de 5.000 habitantes (16,2%), en comparación con el interior rural (6,0%). Por otro lado, los niños y adolescentes y la población afrodescendientes son los sectores de la población más afectados.
INDIGENCIA. La línea de indigencia, solo considera el valor de la canasta alimenticia que equivale a $ 1.930 mensuales para la capital del país, $ 1.792 para el interior urbano y $ 1.612 para el interior rural, según datos del INE. En este sentido, en 2011, el porcentaje de indigentes bajó de 1,1% de la población a 0,5%, lo que significó que 20.079 personas salieran de la indigencia frente a 2010. Esto hizo que bajara a 16.843 la cantidad de individuos en esa condición.
Según Olesker esto se debió a la "focalización en el segundo semestre de las políticas sociales tanto en las asignaciones familiares como en el uso de las tarjetas".
Al igual que sucedió con la pobreza, la indigencia también tuvo una mayor caída en 2011 frente a 2010, ya que en ese año 16.600 personas habían dejado esta condición, frente a los 20.079 del año pasado. Aquí los niños son los más afectados en todas las áreas geográficas. Asimismo, los hogares con jefatura femenina muestra una mayor incidencia de la pobreza extrema que los hogares encabezados por varones.
El País Digital
Ingenieria con cero desempleo ( El observador).
El presidente José Mujica estaba comiendo hace dos semanas en el bar “La casa del whisky”, ubicado en la esquina de las calles Rondeau y Paysandú, en el centro de Montevideo, cuando dos muchachas jóvenes se le acercaron para sacarse una foto. Luego de tomado el retrato, el mandatario les preguntó a qué se dedicaban y ambas respondieron que estudiaban periodismo. “Sáquense eso de la cabeza. No pierdan el tiempo. Estudien ingeniería”, dijo Mujica a las chicas, que quedaron sorprendidas.
El mandatario quiere que los jóvenes uruguayos estudien carreras vinculadas a la tecnología, y hace especial énfasis en la ingeniería. Mujica afirma que ese sector del mercado laboral debe ser fomentado y explotado para asegurar el desarrollo económico del país. Sin embargo, los adolescentes que ingresan año a año a la Universidad de la República (Udelar) le dan la espalda al deseo del presidente.
Del total de alumnos que ingresaron durante el 2010 a la universidad estatal, el 6,5% (1.279 estudiantes) se anotaron en la Facultad de Ingeniería, según el anuario 2011 del Instituto Nacional de Estadística (INE). La otra opción denominada tecnológica que ofrece la Udelar es la Facultad de Química y registró 333 ingresos el año pasado, que equivalen al 1,7% del total de inscriptos (ver recuadro).
Lejos de la intención del presidente, el 26 % de los estudiantes optó por estudiar carreras asociadas a las letras. La Facultad de Derecho tuvo 2.745 (14%) inscriptos, Psicología 1.337 (7%) alumnos anotados y Ciencias Sociales registró 1.094 (5,6%) personas. En tanto, el 19% (3.750) de los estudiantes prefirieron las ciencias económicas o la administración de empresas, entre los anotados a la Facultad y en la Escuela de Administración.
Los 1.612 alumnos que optaron por las carreras “tecnológicas” representan el 8,2% de las 19.467 personas que se inscribieron para comenzar cursos en la Udelar durante el año 2010.
Alrededor de 80.000 estudiantes asisten a formarse en la institución terciaria estatal. La Facultad de Ingeniería tiene cerca de 10.000 alumnos, según dijo a El Observador su decano, Héctor Cancela. Mientras el año pasado egresaron 734 personas de la Facultad de Derecho, fueron 250 los graduados de Ingeniería.
El avance y desarrollo de las tecnologías de la información generó que la demanda del mercado laboral por ingenieros sea creciente, a tal punto que hay dificultades para encontrar profesionales de esa rama capacitados, según indicó un estudio publicado en abril por la consultora Manpower. El informe también reveló que los egresados de la Facultad de Ingeniería son los profesionales más requeridos del mercado.
El 90% de quienes terminaron egresando como ingenieros comenzaron a trabajar en el sector antes de recibirse, según una encuesta realizada por la Facultad de Ingeniería.
El decano de la Facultad afirmó que en “todas” las áreas del sector hay “desempleo cero”. Incluso sostuvo que en algunas especialidades existen vacantes que no pueden ser ocupadas por la falta de profesionales.
“Estamos en la política de fomentar la asistencia a la carrera porque sabemos que quienes egresen seguro van a tener oportunidades en el mercado”, afirmó Cancela.
La caja de jubilaciones y pensiones de profesionales universitarios tiene registrados 3.485 ingenieros. Según el anuario del INE, 2.479 están vinculados a la industria y 1.006 trabajan en construcciones y obras civiles.
La intención de Mujica es solicitar ayuda a las potencias mundiales para que colaboren en la formación de profesionales uruguayos que desarrollen tecnología en el país, según dijo el martes durante el quinto aniversario del Instituto Pasteur.
“Nosotros a los talentosos le tenemos que mangar que nos den una mano para desarrollar talento acá. Es mucho más valioso a la larga que el mercado que no nos pueden dar”, afirmó Mujica. Con la cooperación quiere crear una carrera de ingeniería vial.
Desde la Facultad de Ingeniería explicaron que esa especialización es un perfil de la carrera de Ingeniería Civil, que se llama "Ingeniero Civil, Perfil Transporte y Vías de Comunicación". Agregaron que el perfil existe desde hace años en la facultad.
Economía
El 53% de los hogares son de clase media y apenas 14% son de la alta "Ricos". Tienen posgrado, empleada, seguro médico y aire acondicionado
El País, 16 de febrero de 2012.
MARCELA DOBAL
El 53% de los hogares uruguayos son de nivel socioeconómico medio. Los estratos altos son el 14% (con mayor proporción en Montevideo) y se caracterizan por tener dos o más baños, aire acondicionado, servicio doméstico y formación terciaria.
Los datos surgen del informe "Índice de Nivel Socioeconómico" del Centro de Investigaciones Económicas (Cinve), que realiza una actualización de este indicador que permite clasificar los hogares según su capacidad de consumo o gasto.
Sus autoras, las investigadoras Cecilia Llambí y Leticia Piñeyro, sostienen que el índice existente refiere a una base de 2002, pero que desde entonces ha habido una importante recuperación económica y empleo en niveles récord, que trajeron "cambios en los patrones de consumo de las personas".
El 53% de los hogares del país son de nivel socioeconómico (NSE) medio, un 33% son bajos y un 14% altos, sostiene el estudio, que emplea datos de la Encuesta Continua de Hogares de 2008 del Instituto Nacional de Estadística. Cada franja se corresponde con un ingreso promedio, pero también toma en cuenta los bienes y servicios que tiene el hogar.
El NSE muestra diferencias sustantivas según zonas (ver infografía). "La distribución de los hogares en el interior está más concentrada en los estratos bajos y medios, en comparación con la de Montevideo", señala el informe.
El estrato alto alcanza al 20,6% en Montevideo mientras que en el interior es solo el 9,1%. Esto tiene su correlato en el nivel bajo (24,6% y 39,3%, respectivamente), ya que la clase media no muestra una brecha significativa entre ambos.
A nivel nacional, cada grupo de hogares de igual NSE se subdivide en otros subestratos, que surgen del espectro de variables consideradas, como el barrio, la atención de la salud del jefe de hogar y elementos de confort como el DVD y el lavavajilla. ¿Qué define a cada uno?
MEDIO. La mayoría de los uruguayos están afiliados a mutualistas, tienen lavarropa, teléfono fijo, DVD, televisión para abonados, y educación secundaria. Pocos contratan empleada y solo algunos tienen auto. Pero dentro de este 53% de los hogares medios hay diferencias.
Un 16,6% está en un nivel "medio inferior", que tienen un ingreso promedio de $ 26.000 (a septiembre de 2011) que es percibido por dos o más personas y la mayoría de sus jefes tienen hasta primaria completa y un alto porcentaje tiene estudios medios. En gran parte están afiliados a mutualistas y la mayoría cuenta con lavarropa, teléfono fijo, DVD y televisión para abonados.
Por encima de esos hogares, hay un 18,9% de NSE "medio medio", con ingresos que promedian los $ 34.000. En general, cuentan con un solo baño, se diferencian de los anteriores en que hay más jefes con estudios medios e incluso terciarios. Asimismo es muy escasa la contratación de servicio doméstico (la mayoría, por hora).
La franja de NSE "medio superior", que son 17,5% del total y tienen ingresos por unos $ 47.000, destacan porque cuentan con auto y poseen DVD, televisión para abonados y computadora. Al menos un integrante es universitario.
ALTO. Los que logran un nivel de vida más elevado (14%) se caracterizan por ser universitarios, contratar empleada, tener aire acondicionado y hasta seguros de salud privada. Un 10,5% son de NSE "alto inferior". Sus ingresos promedian los $ 75.000 y destacan por el nivel de formación de sus jefes, mayoritariamente terciario completo e incluso con posgrado. Se diferencian del nivel "medio superior" en que es mayor la contratación de servicio doméstico y porque es más frecuente que la vivienda disponga de dos o más baños.
En tanto, el grupo de hogares con NSE "alto superior" es 3,5% del total del país. Aquí la mayoría de los hogares tiene aire acondicionado y cuentan con tres o más televisores en el hogar. Un número muy elevado tiene televisión para abonados y contrata servicio doméstico diariamente. Además, es significativo el número de jefes de hogar con posgrado y afiliados a seguros de salud privados.
BAJO. En el otro extremo resalta la escasez de confort. El nivel socioeconómico bajo tiene una proporción mayor de hogares de tipo "bajo superior" (20,1%) que "bajo inferior" (12,9%). Los aspectos distintivos del "inferior" son que una porción muy elevada recibe atención en salud pública, reside en viviendas con techo de chapa y no cuenta con teléfono fijo ni lavarropa. Incluso es significativo el número de casos sin heladera. El jefe del hogar tiene a lo sumo primaria completa y es casi generalizado que sea el único integrante que percibe ingresos.
En tanto, en el nivel "superior" solo en la mitad de los casos hay una única persona que recibe ingresos. Si bien la gran mayoría cuenta solo con primaria completa, también es importante la presencia de estudios medios. A su vez, solo la mitad se atiende en salud pública. Este grupo tiene más elementos de confort: casi todos poseen refrigerador y descienden significativamente las viviendas con techo precario.
Claves de cada nivel económico Los hogares de nivel "bajo inferior" destacan porque ocho de cada 10 de sus jefes de hogar se atiende en salud pública y a lo sumo tiene formación primaria completa. El 80% tiene techo de chapa y no dispone de teléfono fijo.
A diferencia de los anteriores, el 95% de los hogares de perfil "bajo superior" tienen heladera. Solo el 54% de los jefes se atiende en hospitales públicos, aunque la gran mayoría sigue teniendo hasta educación primaria (68%).
La mayoría de los hogares "medio inferior" tiene dos o más integrantes que perciben ingresos. El 59% de sus jefes tiene primaria completa y mutualista. De cada 10, seis tienen lavarropa y teléfono fijo y cuatro DVD y TV cable.
Entre los hogares de mitad de tabla ("medio medio"), el 40% de los jefes cursó secundaria y en el 11% de los casos al menos un integrante llegó a terciaria. El 72% de los jefes tiene mutualista y solo el 16% se atiende en salud pública. El 90% tiene un solo baño.
En el nivel "medio superior", la cuarta parte de los hogares cuenta con al menos un universitario. A su vez, el 52% tiene auto y dos tercios cuentan con DVD, televisión para abonados y computadora, mientras que un 70% tiene dos o más televisores en el hogar.
En el perfil "alto inferior" son frecuentes la formación terciaria y de posgrado (37% y 27%, respectivamente). Notorias diferencias frente al nivel "medio superior" son que la contratación de servicio doméstico ocurre en el 36% de los casos (contra 11%), y que casi la mitad tiene dos o más baños. El aire acondicionado alcanza a 31% de los hogares.
En el "alto superior", más de la mitad de los hogares tiene aire acondicionado y tres o más televisores. Un quinto de los jefes realizó posgrado y la cuarta parte tiene seguro médico. El 80% contrata servicio doméstico, un 38% en modalidad diaria y el 7% con cama.
El País Digital
MARCELA DOBAL
El 53% de los hogares uruguayos son de nivel socioeconómico medio. Los estratos altos son el 14% (con mayor proporción en Montevideo) y se caracterizan por tener dos o más baños, aire acondicionado, servicio doméstico y formación terciaria.
Los datos surgen del informe "Índice de Nivel Socioeconómico" del Centro de Investigaciones Económicas (Cinve), que realiza una actualización de este indicador que permite clasificar los hogares según su capacidad de consumo o gasto.
Sus autoras, las investigadoras Cecilia Llambí y Leticia Piñeyro, sostienen que el índice existente refiere a una base de 2002, pero que desde entonces ha habido una importante recuperación económica y empleo en niveles récord, que trajeron "cambios en los patrones de consumo de las personas".
El 53% de los hogares del país son de nivel socioeconómico (NSE) medio, un 33% son bajos y un 14% altos, sostiene el estudio, que emplea datos de la Encuesta Continua de Hogares de 2008 del Instituto Nacional de Estadística. Cada franja se corresponde con un ingreso promedio, pero también toma en cuenta los bienes y servicios que tiene el hogar.
El NSE muestra diferencias sustantivas según zonas (ver infografía). "La distribución de los hogares en el interior está más concentrada en los estratos bajos y medios, en comparación con la de Montevideo", señala el informe.
El estrato alto alcanza al 20,6% en Montevideo mientras que en el interior es solo el 9,1%. Esto tiene su correlato en el nivel bajo (24,6% y 39,3%, respectivamente), ya que la clase media no muestra una brecha significativa entre ambos.
A nivel nacional, cada grupo de hogares de igual NSE se subdivide en otros subestratos, que surgen del espectro de variables consideradas, como el barrio, la atención de la salud del jefe de hogar y elementos de confort como el DVD y el lavavajilla. ¿Qué define a cada uno?
MEDIO. La mayoría de los uruguayos están afiliados a mutualistas, tienen lavarropa, teléfono fijo, DVD, televisión para abonados, y educación secundaria. Pocos contratan empleada y solo algunos tienen auto. Pero dentro de este 53% de los hogares medios hay diferencias.
Un 16,6% está en un nivel "medio inferior", que tienen un ingreso promedio de $ 26.000 (a septiembre de 2011) que es percibido por dos o más personas y la mayoría de sus jefes tienen hasta primaria completa y un alto porcentaje tiene estudios medios. En gran parte están afiliados a mutualistas y la mayoría cuenta con lavarropa, teléfono fijo, DVD y televisión para abonados.
Por encima de esos hogares, hay un 18,9% de NSE "medio medio", con ingresos que promedian los $ 34.000. En general, cuentan con un solo baño, se diferencian de los anteriores en que hay más jefes con estudios medios e incluso terciarios. Asimismo es muy escasa la contratación de servicio doméstico (la mayoría, por hora).
La franja de NSE "medio superior", que son 17,5% del total y tienen ingresos por unos $ 47.000, destacan porque cuentan con auto y poseen DVD, televisión para abonados y computadora. Al menos un integrante es universitario.
ALTO. Los que logran un nivel de vida más elevado (14%) se caracterizan por ser universitarios, contratar empleada, tener aire acondicionado y hasta seguros de salud privada. Un 10,5% son de NSE "alto inferior". Sus ingresos promedian los $ 75.000 y destacan por el nivel de formación de sus jefes, mayoritariamente terciario completo e incluso con posgrado. Se diferencian del nivel "medio superior" en que es mayor la contratación de servicio doméstico y porque es más frecuente que la vivienda disponga de dos o más baños.
En tanto, el grupo de hogares con NSE "alto superior" es 3,5% del total del país. Aquí la mayoría de los hogares tiene aire acondicionado y cuentan con tres o más televisores en el hogar. Un número muy elevado tiene televisión para abonados y contrata servicio doméstico diariamente. Además, es significativo el número de jefes de hogar con posgrado y afiliados a seguros de salud privados.
BAJO. En el otro extremo resalta la escasez de confort. El nivel socioeconómico bajo tiene una proporción mayor de hogares de tipo "bajo superior" (20,1%) que "bajo inferior" (12,9%). Los aspectos distintivos del "inferior" son que una porción muy elevada recibe atención en salud pública, reside en viviendas con techo de chapa y no cuenta con teléfono fijo ni lavarropa. Incluso es significativo el número de casos sin heladera. El jefe del hogar tiene a lo sumo primaria completa y es casi generalizado que sea el único integrante que percibe ingresos.
En tanto, en el nivel "superior" solo en la mitad de los casos hay una única persona que recibe ingresos. Si bien la gran mayoría cuenta solo con primaria completa, también es importante la presencia de estudios medios. A su vez, solo la mitad se atiende en salud pública. Este grupo tiene más elementos de confort: casi todos poseen refrigerador y descienden significativamente las viviendas con techo precario.
Claves de cada nivel económico Los hogares de nivel "bajo inferior" destacan porque ocho de cada 10 de sus jefes de hogar se atiende en salud pública y a lo sumo tiene formación primaria completa. El 80% tiene techo de chapa y no dispone de teléfono fijo.
A diferencia de los anteriores, el 95% de los hogares de perfil "bajo superior" tienen heladera. Solo el 54% de los jefes se atiende en hospitales públicos, aunque la gran mayoría sigue teniendo hasta educación primaria (68%).
La mayoría de los hogares "medio inferior" tiene dos o más integrantes que perciben ingresos. El 59% de sus jefes tiene primaria completa y mutualista. De cada 10, seis tienen lavarropa y teléfono fijo y cuatro DVD y TV cable.
Entre los hogares de mitad de tabla ("medio medio"), el 40% de los jefes cursó secundaria y en el 11% de los casos al menos un integrante llegó a terciaria. El 72% de los jefes tiene mutualista y solo el 16% se atiende en salud pública. El 90% tiene un solo baño.
En el nivel "medio superior", la cuarta parte de los hogares cuenta con al menos un universitario. A su vez, el 52% tiene auto y dos tercios cuentan con DVD, televisión para abonados y computadora, mientras que un 70% tiene dos o más televisores en el hogar.
En el perfil "alto inferior" son frecuentes la formación terciaria y de posgrado (37% y 27%, respectivamente). Notorias diferencias frente al nivel "medio superior" son que la contratación de servicio doméstico ocurre en el 36% de los casos (contra 11%), y que casi la mitad tiene dos o más baños. El aire acondicionado alcanza a 31% de los hogares.
En el "alto superior", más de la mitad de los hogares tiene aire acondicionado y tres o más televisores. Un quinto de los jefes realizó posgrado y la cuarta parte tiene seguro médico. El 80% contrata servicio doméstico, un 38% en modalidad diaria y el 7% con cama.
El País Digital
Uruguay: en busca de las memorias perdidas. Por Samuel Freedman para el New York Times ( año 2003).
MONTEVIDEO, Uruguay - Hace veinte años, un antropólogo llamado Teresa Porzecanski puso un anuncio en un periódico judío buscando los restos de una historia no escrita, las cartas y las fotos de decenas de miles de inmigrantes de Europa del Este y del Imperio Otomano.
Con un estudioso cuidado de los contenidos de sus armarios y cajones , a pesar del envejecimiento de los inmigrantes se acercó con cautela, no sólo a las cartas y las fotografías, sino también a los cubiertos, candelabros rituales, samovares.
La Sra. Porzecanski y sus estudiantes con cuadernos y grabadoras en mano, entrevistaron a decenas de estos.
Así, los recuerdos y las donaciones comenzaron a tener un pequeño auge literario relatando la experiencia judía en una nación que apoyó y practicó en gran medida el compromiso estadounidense de aceptar la diversidad.
La población judía de Uruguay se ha reducido de 40.000 integrantes después de la Segunda Guerra Mundial a una estimación no oficial de 15.000 ahora, principalmente debido a los problemas económicos en este país de 3 millones de habitantes.
Pero se ha producido una corriente de memorias, tratados académicos, historias orales y novelas. El mayor éxito comercial hasta la fecha, lo tiene la novela autobiográfica de Mauricio Rosencof "Las cartas que no llegaron" "Fue como descubrir que algo que había sido invisible", dijo Porzecanski de sus entrevistados. "No dieron importancia a sus propias vidas. Había una sensación de avergonzarse de su propia historia, de ser perseguidos en sus países de origen, no se dieron cuenta de la importancia de lo que habían hecho aquí Formar un banco o una institución benéfica o una organización. "
Miguel Feldman, un destacado historiador de la vida judía en Uruguay, considera que la realización antedicha fue una especie de acto de desesperación. "La comunidad judía se está convirtiendo cada vez más pequeña, y la mayoría de las personas se da cuenta que el conocimiento de nuestros orígenes se está perdiendo", dijo Feldman, de 74 años, hablando en español a través de un intérprete en un hotel de Montevideo."La primera generación ya se ha ido. Soy el hijo de un inmigrante y ya estoy viejo".
Hoy en día Israel y los Estados Unidos representan más del 80 por ciento de la población judía del mundo, 10,3 millones de los 12,5 millones de dólares, dijo Steven Bayme, el director nacional de la vida contemporánea judía por el Comité Judío Americano.
En 1939, menos de un tercio de los Judios vivía en los Estados Unidos y lo que entonces era Palestina apenas incluía a 520 000 judíos frente a 17 millones.
Sin embargo, Uruguay es también distinto a sus vecinos. A diferencia de Argentina y muchos otros países de América Latina, Uruguay es una democracia liberal y secular en gran parte de su historia. Se convirtió en república en 1830 y ha permanecido como tal , con la excepción de las dictaduras de derecha en los períodos de 1932-38 y 1973-85. Se separó a la Iglesia y el Estado en 1917. Y en 1890, había promulgado una "política de puertas abiertas", que fomentó la inmigración mediante la emisión de visados de forma gratuita e incluso proporcionó un albergue para los recién llegados.
Aunque los primeros inmigrantes judíos a Uruguay llegaron sobre todo de la Turquía otomana, en última instancia, la mayoría procedieron de Europa del Este, Hungría y Alemania. Miles llegaron a la mitad y finales de 1930, cuando los Estados Unidos en gran parte se negó a aceptar refugiados judíos de la Europa de Hitler, y las naciones latinoamericanas como Cuba, México y Argentina establecieron barreras similares.
Las experiencias de la primera generación de Judios uruguayo ahora llenan tales trabajos académicos como "tiempos difíciles", el Sr. Feldman ("Tiempos Dificiles") y la Sra. Porzecanski "Historia de la vida de los inmigrantes judíos en Uruguay" ("Historias de Vida de Inmigrantes Judíos al Uruguay "). En un plano más personal, Esther Cukierman en su libro "inmigrantes", relata el viaje de su padre desde Polonia a Uruguay en la década de 1920, mientras que Raúl Jacob explora las pertenencias de un refugiado judío alemán para describir la vida en "La Valija del Tio Hugo ".
A mediados de la década de 1990, los libros habían comenzado a atraer la atención de los otros grupos étnicos de Uruguay, que incluyen los españoles y los italianos. El título incomparable "Entra la Matza y El Mate" fue escrito por autores judíos y gentiles. Se recibió una crítica a toda página en el diario El País de Montevideo. Bajo un titular que se traduce como "El violinista en el tejado" el matutino expresó: "Es un signo feliz de que el mosaico multicultural este tratando de dar un espacio a sus partes", dijo Ilan Stavans, profesor de Amherst College, que es un experto en literatura latinoamericana judía.
El encuentro de los Judios y Uruguay ha dado humor y patetismo. El inmigrante por excelencia trabajó como vendedor ambulante conocido por el término español-yiddish "cuentenik". El "cuente", se refiere a los registros escritos a mano que los vendedores utilizan para mantener sus cuentas. Un verdadero éxito "cuentenik" contratando subordinados llamados "klappers," de la palabra yiddish para golpear, que iban de puerta en puerta solicitando órdenes. Un cliente que no paga su factura se le llamó "tshvok", la palabra yiddish para "clavo", en alusión a un modismo uruguayo que una deuda no pagada es tan irritante como un clavo.
La investigación realizada por el Sr. Feldman y la Sra. Porzecanski también ha resucitado el heroísmo de un diplomático uruguayo llamado Florencio Rivas. Mientras se desempeñaba como cónsul general en Alemania, Rivas albergó a más de 150 Judios en el predio de la Embajada durante la Kristallnacht en 1938, cuando los nazis inspiraron turbas que atacaron a las sinagogas y la integridad física de los Judios.
A continuación, se emitieron todos los pasaportes y visas para asegurar el paso a Uruguay. Hasta ahora, sin embargo, ningún libro ha coincidido con el fenómeno de El señor Rosencof " Las Cartas que nunca llegaron." Este atraviesa la narrativa de la corriente de conciencia de 60 años de la historia uruguaya, de los inmigrantes, arrastrando a sus abuelos polacos a la muerte. El propio autor estuvo privado de libertad durante 11 años, durante los años 1970 y 1980 debido a su liderazgo del grupo revolucionario Tupamaros. "Las Cartas", que ha pasado por 10 ediciones en América del Sur y dos ediciones en España, está siendo adaptado para la etapa en Uruguay y traducida al Inglés por Louise Popkin.
"Es una obra que aborda la relación entre los padres y demás antepasados", dijo Rosencof en una entrevista telefónica reciente. "Todos tenemos en nuestros ancestros que vinieron a alguien en los barcos." Sus padres pertenecían a una generación de Judios pobres. "Trabajaron todo el día", dijo. "Ellos no hablan mucho sobre el pasado. Nunca tuvimos la oportunidad de preguntar, ¿cómo era la música de su pueblo, lo que fue la guerra, qué era la vida."
Copyright 2003 The New York Times Company. Reproducido de The New York Times, Arts & Ideas, del 16 de agosto de 2003.
La Tregua ”, cincuenta años después... Por Dr. David Malowany.
La más popular publicación de Mario Benedetti ( 1920-2009) vio la luz en 1960. Ambientada en Montevideo, varias cosas ya no están: los trolleybuses, el Café El Tupí en el Palacio Salvo. La calle Sierra se llama Fernández Crespo.
Tampoco existe “el mazacote informativo del El Día, apenas interrumpido por una que otra morisqueta anticlerical”. La robusta complexión de La Mañana, ganadera como ella sola”. En palabras del protagonista: “que diferentes y que iguales. Entre ellos juegan una especie de truco, engañándose unos a otros, haciéndose señas, cambiando de parejas. Pero todos se sirven del mismo mazo, todos se alimentan de la misma mentira”. Sigue estando el Diario El País con su civilizada hipocresía, la Ciudad Vieja y fundamentalmente ese monstruo folklórico que es el Palacio Salvo, tan feo que a uno lo pone de buen humor. Pocitos ya no es un barrio de pitucos que se levantan tarde, sino que se ha transformado en un barrio familiar con una fuerte presencia judía.
No está el Café Sorocabana. En su sucursal de 25 de Mayo y Misiones, fue escrita la novela, entre almuerzo y almuerzo del autor y en él transcurre la declaración de amor de Martín Santomé, viudo de 49 años, a su compañera de trabajo 25 años menor, Laura Avellaneda.
En el Uruguay de la novela algunas cosas siguen igual. Santomé para iniciar su trámite de jubilación debe dar coimas. “ Ahora también da coima el que quiere conseguir algo lícito y esto quiere decir, relajo total” .
Martín tenía 49 años, había enviudado 20 años antes. Planeaba jubilarse, no por el ocio sino por el derecho a trabajar en aquello que quería. Se hizo cargo de sus tres hijos, pero dicha circunstancia no le da orgullo sino cansancio. Salir adelante con sus hijos era su obligación. El único escape para que la sociedad no se encarara con él y le dedicara la mirada inexorable que se reserva a los padres desalmados. Con sus hijos no se entendía, especialmente con el menor, Jaime, de tendencias homosexuales. Su hija Blanca trabó una amistad con Avellaneda, solo para conocer a su padre. A Esteban le reprochaba ser un funcionario público.
Escribía un diario íntimo es decir reflexionaba. Al su joven amor lo llamaba por su apellido, Avellaneda. Rechazó un ascenso. Con Laura planeaba diversiones sencillas, ir al cine, a un restorán, a una confitería. Algún domingo, frío pero con sol, caminarían por la orilla buscando un aire mejor. Comprarían algún libro, disco, pero sobre cualquier otra cosa, los entretendría hablar. El amor entre ellos fue clandestino y de la muerte de Laura se enteró por un llamado a su lugar de trabajo.
Cincuenta años después, en una sociedad aniñada e hiperconsumista pocos se reflejan en Santomé. Un amor como el descrito no solo no sería clandestino sino que es frecuente. Nadie autoreflexiona. Ganar mas dinero es una religión por lo que nadie entendería como alguien puede planear retirarse a los 49 años rechazando un ascenso. No obstante Santomé no fue feliz. Era evidente para él, que “Dios le concedió un destino oscuro. Ni siquiera cruel. Simplemente oscuro. Le concedió una tregua. Ahora, metido en su destino, es más oscuro que antes, mucho más”.
La Tregua fue llevada al cine dos veces. En 1974 por Sergio Renán juntando un elenco increíble encabezado por Héctor Alterio y Ana María Piccio, candidata al Oscar como mejor película extranjera. También hubo una versión del mexicano Alfonso Rosas del año 2003. Paradójicamente a principios de la primera década del dos mil, otra película, Whisky, se transformaría en el mayor éxito cinematográfico uruguayo describiendo un Montevideo oscuro, decadente, donde uno de los protagonistas, de sesenta años, relega la felicidad en el cuidado de la empresa familiar y de su anciana madre, demostrando la gran verdad de que pintando a tu aldea, pintarás al mundo.
Carlos Paez Vilaró por el Arq. Larreta.
Carlos Paez Vilaró nació en Montevideo el 1º de Noviembre 1923, contando a la fecha con 86 años plenos de entusiasmo y vitalidad.
Marcado por una fuerte vocación artística, partió en su juventud a Buenos Aires dónde se vinculó al medio de las artes gráficas. A SU REGRESO A Uruguay, en la década de los 40, entra de lleno a desarrollar su veta artística, estando su temática fuertemente integrada por el candombe y la vida del conventillo (medio mundo) al cual se vinculó estrechamente en ese período. Pintó decenas de cartones, compuso candombes para las comparsas nublas, dirigió sus coros y decoró sus tambores y estandartes, actuando con un gran incentivador y difusor de un folklore urbano que en ese momento no tenía la aceptación de hoy, sino que por el contrario luchaba contra el menosprecio y la incomprensión.
Agotado el tema en su vertiente uruguaya, emprende un largo viaje que iniciará en Brasil, a través de países en los que la cultura negra tenía una fuerte presencia, como Haití, Rep. Dominicana, Liberia, Congo, Camerún, Nigeria y Senegal entre otros. En esta etapa, su actividad artística se expande a nuevos lenguajes como el muralismo, la escultura, la cerámica, el cine y la literatura, dejando en cada disciplina su impronta característica. Conoce también a Picasso, Dalí, de Chirico y Cálder entre otros artistas importantes del momento.
Conoció también e inclusive vivió con el Dr. Albert Schweitzeren en el leprosario de
Lambarene’, integrando posteriormente la expedición francesa por África “Dalia”, que realizó en el film “Batouk”. Distinguidos para clausurar ese año el festival de Canes.
No obstante la multiplicidad de viajes y experiencias que inevitablemente incidieron en su trayectoria artística, en la cual es posible rastrear influencias precolombinas y cubistas, mantuvo con firmeza su lealtad al tema afro-uruguayo al que sigue dedicando su atención de múltiples maneras, inclusive integrando la cuerda de tambores de algunas comparsas en los tradicionales desfiles de “llamadas”.
Ha expuesto sus obras en museos y galerías del mundo entero, conquistando múltiples reconocimientos del público, colegas y críticos. Actualmente el grueso de su producción se expone en el museo (taller Casa Pueblo), entidad cultural que también es su vivienda.
Fundada, diseñada y construída por manos del propio Maestro, se encuentra enclavada en la falda Oeste de Punta Ballena, siendo posible reconocer en su peculiar arquitectura elementos del Modernismo Catalán y de la arquitectura popular Mediterránea que le permite lograr una feliz inserción al paisaje. Quizás su lugar de residencia sea el motivo por el que, en forma totalmente injusta, su figura sea a veces asociada a algunas manifestaciones veraniegas de frivolidad, rotundamente desmentidas por quienes lo conocen íntimamente.
Los uruguayos de cierta edad recordamos la tenacidad y el empeño inquebrantable puesto en la búsqueda del avión accidentado de la Fuerza Aérea uruguaya en la cordillera de los Andes el 12 de Octubre de 1972 en el que viajaba rumbo a Chile su hijo Carlos Miguel. Lo hacía como integrante del equipo de rugby del colegio Old Christians, que era parte del pasaje del avión. A pesar que después de 8 días sin novedades la búsqueda llegó a su fin, no se dio por vencido y organizó expediciones, reclutó voluntarios, consulto’ videntes y se internó él mismo en una búsqueda desesperada por su hijo. El final es por todos conocido, el avión fue encontrado 3 meses después del accidente con 16 sobrevivientes entre los que se encontraba su hijo Carlos Miguel. El artista relató unas notas a modo de diario que fueron editadas con el nombre de “Entre mi hijo y yo, la luna”, una emocionante narración de lo que significaron esos momentos en su vida.
Arq. Antonio Larrea
Marcado por una fuerte vocación artística, partió en su juventud a Buenos Aires dónde se vinculó al medio de las artes gráficas. A SU REGRESO A Uruguay, en la década de los 40, entra de lleno a desarrollar su veta artística, estando su temática fuertemente integrada por el candombe y la vida del conventillo (medio mundo) al cual se vinculó estrechamente en ese período. Pintó decenas de cartones, compuso candombes para las comparsas nublas, dirigió sus coros y decoró sus tambores y estandartes, actuando con un gran incentivador y difusor de un folklore urbano que en ese momento no tenía la aceptación de hoy, sino que por el contrario luchaba contra el menosprecio y la incomprensión.
Agotado el tema en su vertiente uruguaya, emprende un largo viaje que iniciará en Brasil, a través de países en los que la cultura negra tenía una fuerte presencia, como Haití, Rep. Dominicana, Liberia, Congo, Camerún, Nigeria y Senegal entre otros. En esta etapa, su actividad artística se expande a nuevos lenguajes como el muralismo, la escultura, la cerámica, el cine y la literatura, dejando en cada disciplina su impronta característica. Conoce también a Picasso, Dalí, de Chirico y Cálder entre otros artistas importantes del momento.
Conoció también e inclusive vivió con el Dr. Albert Schweitzeren en el leprosario de
Lambarene’, integrando posteriormente la expedición francesa por África “Dalia”, que realizó en el film “Batouk”. Distinguidos para clausurar ese año el festival de Canes.
No obstante la multiplicidad de viajes y experiencias que inevitablemente incidieron en su trayectoria artística, en la cual es posible rastrear influencias precolombinas y cubistas, mantuvo con firmeza su lealtad al tema afro-uruguayo al que sigue dedicando su atención de múltiples maneras, inclusive integrando la cuerda de tambores de algunas comparsas en los tradicionales desfiles de “llamadas”.
Ha expuesto sus obras en museos y galerías del mundo entero, conquistando múltiples reconocimientos del público, colegas y críticos. Actualmente el grueso de su producción se expone en el museo (taller Casa Pueblo), entidad cultural que también es su vivienda.
Fundada, diseñada y construída por manos del propio Maestro, se encuentra enclavada en la falda Oeste de Punta Ballena, siendo posible reconocer en su peculiar arquitectura elementos del Modernismo Catalán y de la arquitectura popular Mediterránea que le permite lograr una feliz inserción al paisaje. Quizás su lugar de residencia sea el motivo por el que, en forma totalmente injusta, su figura sea a veces asociada a algunas manifestaciones veraniegas de frivolidad, rotundamente desmentidas por quienes lo conocen íntimamente.
Los uruguayos de cierta edad recordamos la tenacidad y el empeño inquebrantable puesto en la búsqueda del avión accidentado de la Fuerza Aérea uruguaya en la cordillera de los Andes el 12 de Octubre de 1972 en el que viajaba rumbo a Chile su hijo Carlos Miguel. Lo hacía como integrante del equipo de rugby del colegio Old Christians, que era parte del pasaje del avión. A pesar que después de 8 días sin novedades la búsqueda llegó a su fin, no se dio por vencido y organizó expediciones, reclutó voluntarios, consulto’ videntes y se internó él mismo en una búsqueda desesperada por su hijo. El final es por todos conocido, el avión fue encontrado 3 meses después del accidente con 16 sobrevivientes entre los que se encontraba su hijo Carlos Miguel. El artista relató unas notas a modo de diario que fueron editadas con el nombre de “Entre mi hijo y yo, la luna”, una emocionante narración de lo que significaron esos momentos en su vida.
Arq. Antonio Larrea
Wilson en Israel-1985-. Por el Dr. Juan Raúl Ferreira.
Pistas sobre Israel recuerdos desde niño... Por Juan Raúl Ferreira
En algún tiempo creí que había heredado de mi padre el amor a la causa judía. Después de su muerte entendí que solamente me había dejado pistas. Mi suerte ha sido seguirlas y descubrir su verdadero significado. He dicho que sin el judaísmo, no solo mi Fe sino mi vida carecería de sentido. Wilson hablaba de "esa cosa tan cargada de espiritualidad que es el judaísmo. Era solo una pista. Cuando un día le pregunté por esa enorme casualidad que en nuestra rescate con vida de la Argentina de 1976, ocho de los diez intervinientes eran judíos, su respuesta fue simplemente: "no es casualidad". Cuando en los años nuevos del exilio brindaba diciendo " le shaná ba ba yerushalayim y montevideo" era también una pista.
De niño papá se refería a D"s en la mesa como EL INNOMBRABLE. Fue cuando asistí en el liceo al primer Bar Mitvá que entendí de donde venía aquello. O cuando los pleitos entre blancos y batllistas sobre si escribir su nombre con mayúscula o ´minúscula él decía: "es tan grande su existencia que no cabe ni en letras de molde. Un día tuvo una agria discusión con un artista argentino judío no sionista. Y le dijo "pero y la Tierra, la suya, la de sus paisanos." Pero no figuraba entre mis recuerdos algo tan emotivo y conmovedor como lo que de tantos papeles que le presté,. rescata el Dr Malowany. ¿cómo agradecer su evocación? Quizás, sintiendo que es una nueva pista.
Cuando saludábamos a un amigo judío con el tradicional Shalom: él explicaba: "Hay una palabra que los judíos usan y lo traduce todo maravillosamente, porque habla de Paz, no solamente en el sentido de ausencia de guerra u hostilidad, sino también de profunda solidaridad interior y por eso es que debemos desearnos todos a todos, judíos o cristianos, o de cualquier otra denominación e incluso a aquellos que no tienen la dicha de creer en D"s, la paz en los términos que usan los judíos: Shalom, Shalom.
Wilson en Israel por Dr. David Malowany.
Wilson Ferreira Aldunate, el último caudillo blanco, visitó Israel en 1985. Fue recibido como si se tratase de un jefe de estado. Se reunió con el entonces Primer Ministro Itzjak Shamir, con el Presidente Herzog, con Sharon y demás personalidades del gobierno israelí, en aquel entonces formado por una coalición de laboristas y la derecha.
A su retorno al país contó sus experiencias. Ninguna particularidad del estado judío le pasó desapercibida. Respecto a la religiosidad del israelí medio manifestó: “ es muy curioso, hay un porcentaje bastante más elevado del que yo suponía de judíos no religiosos, pero mi impresión es que hacen trampa, de que tienen la vana ilusión de creer que no lo son, pero lo son...”
Visitó el Kibutz Tel Itzjak , las Universidades y Jerusalém, siempre rodeado de inmigrantes judeo-uruguayos. Refiriéndose a estos contó: “ los judíos uruguayos son notables porque son intransferibles, a veces me da la impresión de que son más judíos que los otros judíos ( que siguen viviendo en Uruguay), pero que son uruguayos, también con singular y divertidad intensidad. Si yo fuera judío viviría en Israel. También aquí digo, tengo una doble posición comprometida, porque por un lado desearía que los judíos vivieran en Israel y por otro lado que los judíos de Uruguay, siguieran viviendo aquí por que los precisamos. Pero supongo que ese desafío permanente que viven los judíos con las dos fuerzas que están ahí, y está bien que estén.
Si hubiese que resumir la impresión que el Estado judío dejó en Wilson ( como se lo llamó cariñosamente en vida aun por sus adversarios políticos) , las siguientes palabras lo dicen todo: “... la tierra no es simplemente una dimensión física. La tierra exige que el hombre tenga con ella una relación que no sea solamente jurídica, sino también necesariamente de amor... la tierra es mas importante que los hombres. Son estos los que pertenecen a la tierra y no al revés... Si los judíos no tuvieran “ el libro” para invocar como prueba de su derecho a la tierra prometida, hubiera bastado con lo que han hecho con ella para haberla merecido”.
Fuente: El Israel que yo ví, publicación del Comité Central Israelita en honor del extinto líder. Agradezco dicho material al Dr. Juan Raúl Ferreira.
En algún tiempo creí que había heredado de mi padre el amor a la causa judía. Después de su muerte entendí que solamente me había dejado pistas. Mi suerte ha sido seguirlas y descubrir su verdadero significado. He dicho que sin el judaísmo, no solo mi Fe sino mi vida carecería de sentido. Wilson hablaba de "esa cosa tan cargada de espiritualidad que es el judaísmo. Era solo una pista. Cuando un día le pregunté por esa enorme casualidad que en nuestra rescate con vida de la Argentina de 1976, ocho de los diez intervinientes eran judíos, su respuesta fue simplemente: "no es casualidad". Cuando en los años nuevos del exilio brindaba diciendo " le shaná ba ba yerushalayim y montevideo" era también una pista.
De niño papá se refería a D"s en la mesa como EL INNOMBRABLE. Fue cuando asistí en el liceo al primer Bar Mitvá que entendí de donde venía aquello. O cuando los pleitos entre blancos y batllistas sobre si escribir su nombre con mayúscula o ´minúscula él decía: "es tan grande su existencia que no cabe ni en letras de molde. Un día tuvo una agria discusión con un artista argentino judío no sionista. Y le dijo "pero y la Tierra, la suya, la de sus paisanos." Pero no figuraba entre mis recuerdos algo tan emotivo y conmovedor como lo que de tantos papeles que le presté,. rescata el Dr Malowany. ¿cómo agradecer su evocación? Quizás, sintiendo que es una nueva pista.
Cuando saludábamos a un amigo judío con el tradicional Shalom: él explicaba: "Hay una palabra que los judíos usan y lo traduce todo maravillosamente, porque habla de Paz, no solamente en el sentido de ausencia de guerra u hostilidad, sino también de profunda solidaridad interior y por eso es que debemos desearnos todos a todos, judíos o cristianos, o de cualquier otra denominación e incluso a aquellos que no tienen la dicha de creer en D"s, la paz en los términos que usan los judíos: Shalom, Shalom.
Wilson en Israel por Dr. David Malowany.
Wilson Ferreira Aldunate, el último caudillo blanco, visitó Israel en 1985. Fue recibido como si se tratase de un jefe de estado. Se reunió con el entonces Primer Ministro Itzjak Shamir, con el Presidente Herzog, con Sharon y demás personalidades del gobierno israelí, en aquel entonces formado por una coalición de laboristas y la derecha.
A su retorno al país contó sus experiencias. Ninguna particularidad del estado judío le pasó desapercibida. Respecto a la religiosidad del israelí medio manifestó: “ es muy curioso, hay un porcentaje bastante más elevado del que yo suponía de judíos no religiosos, pero mi impresión es que hacen trampa, de que tienen la vana ilusión de creer que no lo son, pero lo son...”
Visitó el Kibutz Tel Itzjak , las Universidades y Jerusalém, siempre rodeado de inmigrantes judeo-uruguayos. Refiriéndose a estos contó: “ los judíos uruguayos son notables porque son intransferibles, a veces me da la impresión de que son más judíos que los otros judíos ( que siguen viviendo en Uruguay), pero que son uruguayos, también con singular y divertidad intensidad. Si yo fuera judío viviría en Israel. También aquí digo, tengo una doble posición comprometida, porque por un lado desearía que los judíos vivieran en Israel y por otro lado que los judíos de Uruguay, siguieran viviendo aquí por que los precisamos. Pero supongo que ese desafío permanente que viven los judíos con las dos fuerzas que están ahí, y está bien que estén.
Si hubiese que resumir la impresión que el Estado judío dejó en Wilson ( como se lo llamó cariñosamente en vida aun por sus adversarios políticos) , las siguientes palabras lo dicen todo: “... la tierra no es simplemente una dimensión física. La tierra exige que el hombre tenga con ella una relación que no sea solamente jurídica, sino también necesariamente de amor... la tierra es mas importante que los hombres. Son estos los que pertenecen a la tierra y no al revés... Si los judíos no tuvieran “ el libro” para invocar como prueba de su derecho a la tierra prometida, hubiera bastado con lo que han hecho con ella para haberla merecido”.
Fuente: El Israel que yo ví, publicación del Comité Central Israelita en honor del extinto líder. Agradezco dicho material al Dr. Juan Raúl Ferreira.